Las motocicletas eléctricas son una excelente alternativa para moverse en los centros urbanos, pues ayudan a llegar a destino rápidamente al tiempo que no producen emisiones contaminantes. Son además vehículos de adquisición y mantenimiento económicos, lo que los ha convertido en elementos muy frecuentes y populares en las grandes ciudades de todo el mundo.
Todos los vehículos, eléctricos o de motor de combustión, pueden verse afectados por las bajas temperaturas, y de hecho, hay estadísticas en torno a este tema, como las de Noruega (un país donde el frío debe ser tomado muy en serio). Los datos indican que es más común tener que auxiliar, por problemas relacionados con el frío, a más conductores de vehículos de gasolina que a conductores de vehículos eléctricos. No olvidemos que hablamos de un país con un altísimo número de vehículos eléctricos.
Efectos del frío sobre las motocicletas eléctricas
Junto a lo anterior, no se puede negar que el frío puede afectar de distintas formas las motocicletas eléctricas, empezando por el corazón de estos vehículos: la batería. Si dejamos la moto a la intemperie, las temperaturas muy bajas pueden afectar las reacciones químicas a través de las cuales se genera y se conserva la electricidad. Esto hace que la batería no funcione como es debido, y presente limitaciones en su capacidad de carga y en su rendimiento. Por ejemplo, es posible que la batería no proporcione la misma autonomía que con temperaturas más altas.
Los motores eléctricos también se ven afectados en su rendimiento cuando hace mucho frío, y pueden generar menos energía, perder algo de su capacidad de aceleración y de su capacidad para mantener velocidades altas.
Medidas que podemos tomar
Antes de pasar a las recomendaciones, hay que destacar que los principales fabricantes de motocicletas eléctricas han tomado nota del comportamiento de los componentes eléctricos de estos equipos a temperaturas muy bajas.
Por lo general logran mantener un rendimiento aceptable sin importar cuál sea la temperatura (aunque sigue habiendo casos de bajas temperaturas extremas y excepcionales que pueden afectar hasta los mejores y más avanzados modelos de motocicletas eléctricas).
Las recomendaciones:
- No dejemos la motocicleta expuesta a bajas temperaturas. Si sabemos que va a hacer frío, es importante cubrir la moto con una funda o una lona, o guardarla en un espacio cerrado y abrigado.
- También podemos utilizar calentadores que se conectan directamente a la batería y que sirven para mantenerla a una temperatura óptima mientras se conduce a muy baja temperatura ambiente.
- Otra manera de aprovechar al máximo la batería en zonas muy frías es a través de la conducción: conducir a velocidad constante, evitar las aceleraciones y no frenar bruscamente. De este modo, la batería sufre menos estrés y su rendimiento es el esperado.
- Otro consejo que se suele dar para que el motor tenga un buen desempeño en temperaturas bajas es el uso de lubricantes de primera calidad. Los lubricantes premium no solo alargan la vida del motor de nuestro vehículo en condiciones normales, sino que también hacen que funcione mejor en temperaturas muy frías, y que exija menos energía a la batería.