2026 será el fin de una era en MotoGP, ya que en 2027 entrará en vigor un nuevo reglamento. Pero también podría ser el final de los motores en línea en la categoría, porque Yamaha está evolucionando su motor V4 y podría tenerlo listo para la próxima temporada.
Puede que desde fuera este movimiento resulte extraño, pero en declaraciones a MotoGP.com, Max Bartolini reconocía que el motor estaba evolucionando y que en caso de ser competitivo la moto de 2026 emplearía este motor.
Primero hay que decir que con la congelación de motores de cara 2026, esto sería posible debido a las concesiones que tiene Yamaha, por lo que a priori podría ser factible. Pero lo cierto es que estrenar un motor V4 no implica solamente un cambio en el concepto del propulsor, sino que requiere cambiar por completo la moto y, por tanto, la M1 tal como la conocemos, dejaría de existir.
Actualmente, a excepción de Yamaha el resto de marcas ya trabajan con un motor V4, pero es aquí cuando surge una nueva duda. Y es que, como decíamos, el reglamento de MotoGP cambia para 2027 y entre todos estos cambios también está el del motor. Si bien es cierto que no habrá variaciones en lo que respecta a configuraciones permitidas y que es casi seguro que no habrá sorpresas y todos los motores serán tetracilíndricos, también es cierto que los propulsores actuales requerirán de adaptaciones a este nuevo reglamento.
El motor V4 de Yamaha ¿es realmente para 2026?
Y eso deja la duda de si Yamaha realmente tiene en mente evolucionar este motor V4 para 2026, o ya está trabajando en 2027 con todas las características técnicas que necesitarán para el nuevo reglamento, incluida la moto.
Porque hasta el momento no hay una certeza de que ese motor V4 haya salido a pista, y aunque la semana pasada en los test de Valencia que Yamaha llevó a cabo junto con Honda no hay una certeza de que lo hayan probado y, desde luego, no hay confirmación de ningún tipo por parte de la firma nipona.
De lo que no cabe duda es que la Yamaha M1 con su motor actual está dando pequeños pasos adelante en competitividad, pero parece muy limitada por la configuración cuatro en línea y no solamente en lo que a potencia se refiere.
Así que en el aire queda saber si Yamaha está realmente trabajando en su moto de 2026, o quizás da por perdida la próxima temporada y va un paso por delante para dar la campanada en 2027.
En cualquier caso, tanto para una como para otra opción no nos queda más remedio que seguir esperando, porque hasta ahora la única certeza es que Yamaha está trabajando en un motor V4. Pero si es mejor o peor, si es para el reglamento actual o para el futuro y si es, que es lo que importa, la pieza que le falta a Yamaha para volver a estar arriba solamente el paso de las semanas y meses nos lo dirá.
