Tras el GP de Gran Bretaña, en el que acabó sexto y lejos del podio, Cal Crutchlow se quejó de que sus neumáticos patinaban exageradamente en carrera, algo que en todo el fin de semana no le había pasado. Sin decirlo directamente acusó a Michelin de haberle dado neumáticos defectuosos, algo parecido a lo que le pasó en Mugello cuando su neumático trasero perdió incluso un trozo de goma.
Ahora ha tomado la palabra Michelin por boca de su responsable máximo en MotoGP, Piero Taramasso, para negarlo. «No tenemos todavía todos los datos del equipo, pero sí los nuestros de los neumáticos y nada revela un problema anormal. Cal se adelantó insinuando que quizás había tenido el mismo problema que en Mugello, pero no es así. En Italia perdió un trozo de goma del neumático trasero debido a una rotura que no sabemos qué pudo provocar. Pero en Silverstone el problema fue la alta temperatura de la pista (44-45 grados) el domingo y el nuevo asfalto: con tantas curvas rápidas los neumáticos no se enfrían y patinaban. Como patinaban, se recalentaban por el spinning excesivo y por eso perdían agarre respecto al sábado, con clima mucho más fresco. A fuerza de sobrecalentarse los neumáticos tuvieron algo de blistering, pequeños agujeros en la goma, que también reducen las prestaciones y el agarre. Pero les pasó a todos: a Cal pero también a Márquez, Rins o Valentino».
Aprovechando la entrevista Taramasso anticipó que en las pruebas de estos días previas al GP de Misano llevarán algunas novedades. Será un nuevo neumático trasero que mejorará según ellos el agarre, duración y tiempos por vuelta, que ya se ha probado en test de Barcelona y Brno, y también un nuevo delantero con mejor tacto y agarre en curva. Necesitan comprobar su duración para confirmar que pueda usarse como alternativa en alguna próxima carrera.
