En menos de una semana los tres principales pilotos del Mundial de MotoGP han sufrido unas inorportunas caídas antes de iniciarse la gira asiática, que será fundamental en el desenlace del Mundial. Tras la fuerte caída de Valentino Rossi en las pruebas de Michelin, que se saldó con abrasiones en un codo, y la fractura de un dedo sufrida por Marc Márquez mientras entrenaba en bicicleta, ahora le toca el turno a Jorge Lorenzo, que ha sufrido una caída en una sesión privada de entrenamiento.
No se ha determinado si el accidente de Lorenzo, que se produjo en la tarde del sábado, tuvo lugar en su habitual pista de pruebas de Italia, o fue en Barcelona. Lo cierto es que Lorenzo se lastimó el hombro izquierdo, que ya le ha dado problemas en otras ocasiones. Pasó revisión en Barcelona, donde tras una serie de pruebas se confirmó que padecía un esguince de ligamentos del hombro izquierdo en grado 1, el más leve. Según los médicos, esto no le impedirá rendir al máximo en el Gran Premio de Japón, cuyos entrenamientos arrancan el próximo viernes.
Con el apretado calendario que tienen por delante los pilotos de MotoGP, con tres carreras consecutivas, Japón, Australia y Malasia, cualquier incidente puede resultar clave y terminar desequilibrando la balanza.