Ya sabemos cuáles son las principales motos del mercado español en el segmento A2, pero ¿tenemos claro qué hacer para conseguir nuestro carnet rosado de moto?
Desde el día 9 de diciembre de 2009, momento en el que entró en vigor el nuevo Reglamento General de Conductores (anticipándose en cuatro años a la Directiva Europea sobre el tema), todo aquel que quiera conducir una motocicleta de una cilindrada superior a 125 cc debe obtener un nuevo permiso: el A2. Este carnet permite la conducción, a partir de los 18 años, de motos de hasta 35 kw (47.6 CV) y una relación de potencia/peso de 0,2 KW/Kg. El nuevo permiso A2 se puede obtener de dos formas: mediante acceso directo o mediante acceso progresivo.
Como a la hora de obtener cualquier permiso, en el caso del Carnet A2 también tienes opción a 2 convocatorias, es decir, si suspendes dos veces, te tocará renovar y volver a pagar tasas.
El acceso directo está dirigido a aquellos que no tienen experiencia a la hora de conducir motos. Incluye dos exámenes teóricos (uno común y otro específico) y dos pruebas prácticas (maniobras en circuito cerrado y, la última, de circulación en vías abiertas al tráfico). Si el examinado tiene carnet de coche queda exento de la prueba teórica común.
Para aquellos que ya tienen experiencia montando en moto existe el acceso progresivo. Para poder acceder al A2 se exigen al menos dos años de antigüedad con el permiso A1 (nada del B convalidado para usar moto). En este caso sólo se necesita examinarse de la prueba de circulación en vías abiertas al tráfico. Si la apruebas, ya tendrás tu carnet A2.
Exámenes teóricos
El primer examen al que te enfrentas es el teórico de circulación vial, que es el mismo que se necesita para sacarte el carnet de coche. Consta de 30 preguntas tipo test, con la posibilidad de cometer 3 errores. Si cometes más fallos tendrás que volver a examinarte en otra convocatoria.
Posteriormente, te enfrentas al segundo examen teórico. En este caso se trata de una prueba específica sobre motocicletas con 20 preguntas tipo test sobre el manejo, mecánica y circulación sobre las dos ruedas. Se permiten un máximo de dos fallos. Si superas los dos errores, tendrás que presentarte a otra convocatoria. Como para sacarte cualquier tipo de carnet, si no eres capaz de pasar los exámenes teóricos, no podrás acceder a las pruebas prácticas.
Exámenes prácticos
Si consigues aprobar los exámenes teóricos, has dado un gran paso, pero todavía te queda lo más complicado: las dos pruebas prácticas. En primer lugar, el examinado se enfrenta al examen de maniobras. Dentro de este examen, hay dos bloques: uno corto, de destreza y uno más largo contrarreloj. El objetivo de estas pruebas es demostrar al examinador tus aptitudes con la moto tanto en parado como en marcha.
Antes de iniciar las maniobras, debes ajustarte el casco, la indumentaria de protección, y efectuar verificaciones de forma aleatoria sobre el estado de ciertos elementos de la motocicleta, ponerla en marcha y prepararte para realizar las maniobras.
La primera sección comienza con la moto en parado y realizando un sencillo ejercicio para colocarla de frente a la pista tras hacer una L definida por líneas blancas que no debes pisar.
El primer bloque empieza con la moto parada. Lo primero que hay que hacer es colocarla de frente al circuito tras hacer una L delimitada por líneas blancas que no debes atravesar. Una vez que has puesto la moto en su sitio, debes arrancarla y enfrentarte al primer obstáculo. Este consiste en pasar a través de dos líneas paralelas sin pisarlas, un ejercicio de equilibrio. Pasado ese primer escollo debes hacer un eslalon entre cinco conos colocados bastante cerca los unos de los otros. Una vez acabados estos zig zag, tienes que frenar en seco en la zona delimitada para tal cometido.
Nada más finalizar esta prueba y sin perder tiempo, pasamos a la segunda sección del circuito. En ella tienes que completar 90 metros de ida y 90 de vuelta en un máximo de 25 segundos. Esta parte consta de un eslalon más largo y menos técnico que en el primer bloque, un giro de 180 grados para encarar otro eslalon y, finalmente, frenar en seco.
Si no consigues aprobar este examen o el de circulación, tienes un máximo de seis meses desde que te presentaste la primera vez para volver a hacerlo, si no, tu expediente se anulará.
Si eres capaz de superar el examen de maniobras, te podrás examinar del práctico de circulación en vías abiertas al tráfico. En este examen el examinador irá detrás de ti en el coche de la autoescuela y te dirá lo que tienes que hacer en todo momento a través de un intercomunicador. Esta prueba no tiene un tiempo estimado, todo dependerá del criterio del examinador. Para aprobar deberás respetar la señalización y seguir las órdenes del examinador. Si todo va bien y pasas este examen, por fin serás apto para tener el carnet tipo A2.
¿Cuánto cuesta?
Respecto al dinero que te va a costar sacarte el carnet A2, los precios varían mucho entre provincias y autoescuelas. Solo hay una cosa clara, sacarse el carnet antes del año 2010 era mucho más barato que en la actualidad. Con el nuevo reglamento los precios han aumentado.
Aproximadamente, los precios se mueven entre:
- Tasas DGT aproximadas: unos 240 €.
- Psicotécnico: de 30 a 40 €, según provincia
- Clase en pista aproximadas: de 20 a 40 € por media hora, según autoescuela.
- Clase en ciudad aproximadas: de 35 a 50 € por 45 minutos, según autoescuela.
- Total aproximado: unos 500 €, aprobando todo a la primera.
- Renovación: entre 130 y 160 €, en concepto de tasas.
El total dependerá de las ofertas o packs de cada autoescuela. Pero, en general, te tocará rascarte el bolsillo si quieres conseguir el carnet A2.
