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Motos de ensueño a la venta: FWD Manx Norton ‘FW02’ 500

La última motocicleta con la que Barry Sheene venció en una pista
Fotos: Bonhams
El próximo mes de octubre saldrá a la venta posiblemente la última motocicleta con lo que además de vencer en una carrera, el gran Barry Sheene disfrutó a sus mandos. Trágicamente el piloto británico fallecería unos meses después por un cáncer de pulmón. Se estima que su valor en la subasta pueda llegar a las 75.000 libras, unos 86.000 euros al cambio.

Cuando hablamos de Barry Sheene, a la mayoría se nos viene a la cabeza aquella imagen del piloto británico fumándose habitualmente un cigarrillo antes de la salida de cada GP con el casco puesto. Carismático e inigualable, Sheene nos dejaría demasiado pronto, en marzo de 2003 a la edad de los 52 años, tras batallar precisamente con un cáncer de pulmón que se lo llevó para siempre en apenas unos meses.

Justamente poco antes, Sheene competiría y vencería por última vez en una carrera. Lo haría a pilotando la FWD Manx Norton ‘FW02’ 500 que los próximos 15 y 16 de octubre será puesta a la venta en modo subasta por la casa británica Bonhams. Una motocicleta muy especial que esconde una historia digna de contar. No solamente por ser obra del que posiblemente es el mejor especialista en la recreación de Norton Manx del mundo, Fred Walmsley, sino porque este tuvo que prepararla en apenas unas horas para que Sheene pudiera participar en el Goodwood Revival Meeting de 2002, donde lograría hacerse con la victoria a sus mandos. Además, no era la primera vez que el piloto británico corría con una de las motos de FW, ni tampoco la primera en lograr la victoria a sus mandos. 

FWD Manx Norton 'FW02' 500

Unos meses antes haría lo propio en Donington Park y trágicamente en julio de ese mismo año el piloto británico recibía la noticia de su cáncer en estado avanzado. Pero Sheene no quería marcharse sin saborear nuevamente la victoria a los mandos de una máquina de competición. Así que un día antes del Goodwood Revival Meeting 2002 telefoneó a Fred Walmsley, que se encontraba junto a su piloto John Cronshaw en la República Checa donde habían logrado proclamarse vencedores de la Serie Clásica Europea InCA, para pedirle que preparara una moto para él con la que poder salir a pista al día siguiente.

Eso hizo regresar esa misma noche, a toda velocidad, a Fred a Reino Unido donde sustituyó el motor de la FWD Manx Norton ‘FW02’ 500 con la que habían estado corriendo los días anteriores, y la puso a punto para que Sheene disputara la Goodwood Revival Meeting. El propulsor empleado fue cedido por el especialista en preparaciones sobre Norton George Cohen. Tras ese fin de semana, Walmsley le devolvería aquel motor, por lo que la moto que se subasta porta el bloque empleado en la Serie Clásica Europea InCA. Tampoco equipa ni la rueda delantera, horquilla, manillares ni basculante que se montaron específicamente para que compitiera Sheene aquel fin de semana.

FWD Manx Norton 'FW02' 500

Desde el año 2003 la moto ha estado bajo la misma propiedad, la viuda de un coleccionista que la adquirió aquel año tras su venta por parte de Fred Walmsley a un consorcio inversor. Desde entonces esta preparación de Norton Manx ha sido usada en varios eventos y competiciones, destacando su aparición en Le Mans 2004 con el piloto Nick Allison a sus mandos, logrando además dos podios dentro de la categoría donde compitió.

Se cree que su última salida fue en el mitin anual “Sheene Run” de 2005. Esto quiere decir que lleva unos 17 años sin uso por lo que precisa de una puesta a punto general. En la venta se incluye un carenado de carreras extra con el nombre del ex campeón mundial de 500 cc Wayne Gardner, así como un adhesivo del Goodwood Revival de 2003 que se celebró en memoria de Barry Sheene. También dentro del lote hay un depósito extra de aluminio, un largo histórico de propiedad con documentación que acredita la historia de la moto, así como recortes de prensa, fotografías y publicaciones donde aparece este icónico ejemplar.

J. Rubio
J. Rubio
Llevo media vida a vueltas con las letras y finalmente terminé donde siempre quise hacerlo, escribiendo sobre motor. Amante de todo aquello que huela a “Old School”, disfruto cada segundo sabiendo la suerte que atesoro de ser un incurable Petrolhead.

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