Hay una serie de elementos esenciales para evaluar el nivel de las infraestructuras de un país: transporte, energía y comunicaciones. Cuando se dan condiciones eficaces las empresas se desarrollan y crecen, y la economía funciona de forma eficiente. El informe sobre competitividad global 2015-2016 del World Economic Forum sitúa a Hong Kong al frente de la tabla, como la economía con la mejor infraestructura del mundo. En un baremo sobre 7, Hong Kong alcanza un 6,7. Es la quinta vez en los últimos años que se sitúa al frente de la tabla.
Le sigue Singapur (6,5) por delante de Honda y Emiratos Árabes (ambos con 6,3); Japón y Suiza (6,3); Francia (6,1); Gran Bretaña y Francia (6,0); y España (5,9) cierra la tabla de las diez mejores infraestructuras a nivel mundial.
A la hora de realizar la valoración se tienen en cuenta la calidad de las redes de transporte por carretera y ferrocarril, otros medios de transporte como puertos y aeropuertos, así como la calidad del suministro eléctrico, todos ellos elementos fundamentales para el desarrollo industrial y económico.