El objetivo de estas nuevas R1200RT es reemplazar a las viejas y obsoletas R850RT y, aunque no se ha declarado el coste de la operación, sabiendo que estas motos rondan los 20.000 euros de precio al público, estamos hablando de una inversión de casi seis millones de euros. Las nuevas motos de la Guardia Civil las identificaremos, además por su silueta renovada, por el uso de colores más llamativos, en particular el amarillo flúor que es el color recomendado por la Unión Europea para vehículos policiales. Con esta renovación la DGT sigue su plan de puesta al día, ya que hace poco se hizo público su inversión de 156 furgonetas para reforzar los controles de alcohol y drogas.
Otra novedad es que estas motos llegan cuando la DGT ha invertido también en nuevos sistemas de control de velocidad, alcohol y drogas. Las nuevas BMW podrán llevar alguno de estos elementos, de forma que podrán montar de forma más improvisada controles (de velocidad o sustancias) en carreteras o calles. O hacerlo in situ si hay un accidente. El objetivo de poder hacer controles de forma más improvisada es una forma de combatir las aplicaciones de móvil con GPS que algunos usuarios usan, para avisar de cuando hay montado algún control.