La Navidad tiene un peso para la gente muy importante. No sólo desde el punto de vista emocional, sino en todos los aspectos. Son las fechas más especiales del año y eso se nota en la gente. El famoso espíritu navideño nos desborda por todas partes, de forma consciente o inconsciente. Es Navidad.
Pese al carácter tan particular del que gozan días como estos, mucho más importante es no olvidar que siguen siendo unos días del año, pero ya está. Por este motivo, cuando nos enfrentemos a la carretera estas navidades, hay una serie de aspectos fundamentales para que nuestros viajes sean lo más agradable posibles. Cinco consejos sencillos, que de lo fáciles que son muchas veces los olvidamos, pero que siempre están ahí.
Cuidado con los excesos
Estas fechas están señaladas el calendario por todos, y cuando decimos por todos hablamos de nosotros, pero también de la Policía y la Guardia Civil. Es tiempo de las famosas ‘Campañas Especiales de Navidad’, lo que se traduce en una intensificación de los controles en nuestras carreteras.
Cenas de empresa, Nochebuena, Fin de año, son días en los que somos más proclives a cometer más excesos, como consecuencia de las comidas y cenas copiosas, y también a la hora de beber. Nunca olvidarse de los límites de la ley, y de cada uno, porque si no los respetamos podemos recordar estas fiestas por los motivos que menos nos gustarían.
Más vale tarde que nunca
Mucha gente se desplaza para juntarse con su familia y celebrar estos días contando con su compañía. Viajes que se multiplican, haciendo que nuestras carreteras estén más concurridas de lo normal, con todo lo que eso conlleva. Pueden producirse atascos, o que nos cueste encontrar sitio para aparcar, aunque en el caso de las motos esto último es poco probable.
Aún así, lo que nunca debe pasar es que nos entren las prisas por llegar a nuestro destino. Si sabemos de antemano que nuestro viaje puede ser algo más incómodo que en un día normal, debemos salir con tiempo, y si tenemos que llegar algo más tarde, se llega, porque siempre habrá alguien que lo haga todavía más tarde.
Un día cualquiera
Aunque nos encontremos en fechas tan propicias para desconectar y refugiarnos en nuestro entorno familiar, tampoco hay que obviar la cotidianeidad que tienen estos días. Son especiales sí, pero siguen teniendo la misma importancia material que cualquier otro día en el calendario.
Por esta razón, hay que respetar todos los límites de velocidad, no saltarse los semáforos por llegar antes o beber una copa de más por ser Nochebuena. Si nos desviamos de nuestro habitual modus operandi podemos encontrarnos con multas o accidentes que nos amarguen nuestras vacaciones, y eso es algo que todo el mundo quiere evitar.
Atento a todo
Nosotros vamos a mantener nuestros buenos hábitos al manillar de nuestra moto, pero hay gente para todo que no lo hará, por lo que también debemos estar atentos al resto de conductores que se crucen en nuestro camino. Pase lo que pase, nunca entrar en piques o en ser más listo que el prójimo, porque acabaremos mal.
Cambiar de carril sin poner el intermitente, adelantar por la derecha o pararse en medio de la calle son algunas de las maniobras que más repetirá la gente en días como el de hoy, donde la afluencia de vehículos es mayor. Pese a todo esto, nosotros debemos mantener la calma, tu destino es reunirte con los tuyos.
Equipados para días especiales
Hará mucho frío y nos moveremos por la noche, cuando menos visibilidad hay. Esto afecta a todos, pero sobre todo a los motoristas, que siempre tenemos más dificultades para hacernos ver cuando las condiciones meteorológicas aprietan.
Por este motivo, debéis equiparos adecuadamente para hacer frente a las inclemencias del tiempo. Una buena manta térmica para resguardar a nuestras piernas del frío, así como los guantes para nuestras manos. Todo ello sin olvidar el elemento más importante, el casco, que debe adaptarse a nuestra cabeza y ser la mayor garantía de seguridad para el piloto.
