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Bruselas ratifica la prohibición de motores a combustión para 2035

Alemania levanta el veto que no afecta a las motos
Nuevo cambio de guión en el futuro de la automoción en Europa tras el acuerdo alcanzado, en el que Alemania levanta su veto a la prohibición de los motores de combustión.

El futuro de la moto es, a día de hoy, más cierto y seguro de los vehículos en Europa. Como dijimos hace unas semanas, las motos con motores de combustión podrán seguir vendiéndose en 2035, ya que sus efectos sobre la contaminación global son prácticamente despreciables. Dicho esto, la noticia del acuerdo en la Unión Europea entre todos los países de cara a 2035 sí que afecta al sector, pues además de ratificar la prohibición de vender coches nuevos con motor de combustión, se permitirá el uso de carburantes “limpios”. Es decir aquellos neutros en carbono que previsiblemente podrán usar nuestras motos llegado el momento.

Además de los motores de combustión estándar, se prohibirán los tan cuestionados híbridos y microhíbridos, puesto que a pesar de la capacidad de moverse mediante baterías, la mayor parte del tiempo emplean los denominados motores térmicos. Aun así, la prohibición de la Unión Europea habla de vender vehículos que no sean neutros en carbono, por lo que en principio deja vía libre tanto a los eléctricos como a los impulsados con hidrógeno. Por otro lado, nos genera dudas sobre si podrán fabricar modelos que, específicamente, solo funcionen con combustibles sintéticos sin emisiones.

Solo los vehículos cero emisiones podrán venderse

De todas maneras no deja de llamar la atención la lucha de Europa contra todo el mundo. Mientras que el camino marcado para dentro de poco más de una década parece en marcha, el resto de países del mundo no parecen seguir esta línea y, por tanto, suena utópico e incluso arrogante pensar que 444 millones de personas puedan cambiar la tendencia de un planeta que, para 2035, podría rozar los 9.000 millones de habitantes.

Hay que pensar, por el bien de nuestra propia tranquilidad, que todas estas medidas se irán meditando y se tomarán en cuenta las realidades de todos los usuarios. Por ahora todos los planes pasan por ideas poco concretas más allá de las prohibiciones, pero no sitúan el foco en de qué manera pasará a ser el transporte privado en general, ni cómo se generará la nueva fuente de energía por no hablar de los costes que tendrán. Quizás en 2035 la moto sea la única solución razonable para moverse de manera privada y económica, o quizás haya que volver al burro. Difícil de saber cuando el transfondo real está muy lejos de los focos.

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