La carrera empezó con el guión previsto: buena salida de Marc, y golpe a sus rivales en la primera vuelta, pasando con 1’1 segundos de ventaja sobre el segundo. Jack Miller salió mejor que las Yamaha de Viñales y Quartararo y fue el primer “perseguidor” de Marc, muy entre comillas porque la Honda rodó como mínimo medio segundo por vuelta más rápido, hasta llegar a superar los cuatro segundos de ventaja, cuando Marc pareció bajar la presión.
Por detrás, Miller aguantaba segundo mientras Viñales daba cuenta primero de Quartararo y luego de la Ducati, para escaparse en busca del líder, o por lo menos de reducir su ventaja. Más atrás, Aleix Espargaró aguantaba quinto con la Aprilia hasta que le cazó Dovizioso, en plena remontada. Sorprendente el rendimiento de la Aprilia, tanto como la mala carrera de Valentino: Rossi no pudo pasar a Aleix y luego fue superado por Dovi primero y Crutchlow después.
A diez vueltas del final, Dovizioso se acercaba a Miller para la lucha por el podio (y ser la primera Ducati) mientras Viñales mantenía un segundo de ventaja sobre ambos, y Marc rodaba manteniendo distancias relativamente tranquilo delante. Dovi tardó poco en pasar a Miller, y por detrás Crutchlow atrapó y superó a Espargaró, a quien esa séptima plaza seguro que todavía sabía muy bien.
A cinco vueltas del final, Dovizioso empezaba a atacar a Viñales y se aceraba a medio segundo. Marc seguía a un ritmo de crucero tranquilo con seis segundos de ventaja. A tres vueltas del final, Dovizioso cazó a Viñales y le pasó en la recta sin problemas. Miller había seguido a Dovi y cazó a Maverick en la última vuelta, pasándole. La lucha entre la Ducati y la Yamaha por la última plaza del podio terminó en la recta, mientras Márquez “pescaba” una cómoda victoria: 78ª victoria en su GP número 200. Pero el segundo puesto de Dovi evitaba una gran diferencia de puntos, y Marc tendrá un poco menos fácil llevarse el título ya en Tailandia, el próximo GP: basta que le saque dos puntos al de Ducati.