Silverstone nos ha brindado un Gran Premio atípico, en lo que a condiciones climatológicas se refiere. Exceptuando el sábado por la mañana, hemos tenido un fin de semana muy estable. El estado de la pista sigue no siendo el mejor, con muchos baches en mitad de la trazada que dificultan mucho el trabajo de los pilotos que insisten en la necesidad de un reasfaltado.
El resultado del rendimiento de los neumáticos Michelin ha sido francamente bueno, han permitido disfrutar de una carrera muy rápida y con tiempos muy estables. La caída de rendimiento ha sido de apenas medio segundo en cualquiera de las especificaciones utilizadas en carrera. La peculiaridad, a nivel de repercusión para las marcas cuando es un campeonato mono marca, es que cuando las cosas van bien no se reconoce el trabajo de la marca.
Respecto al campeonato de pilotos, ha sufrido un vuelco por la rotura de motor de Honda. Algo nada habitual en la marca japonesa. Esta rotura ha cortado la racha ascendente de Márquez. En el piloto español hemos visto una notable diferencia a nivel de pilotaje entre los entrenamientos y la carrera. Durante las sesiones de pruebas pudimos ver un Márquez agresivo en la conducción y sufrió alguna caída considerable, por fortuna, si consecuencias físicas evidentes. La carrera fue otra historia, donde en todo momento lo vimos pilotando siendo mucho menos incisivo en las entradas de los virajes. La rotura de motor nos privó entender si fue estrategia o si las sensaciones durante la carrera con el tren delantero no fueron las mismas que durante el fin de semana. Veremos, durante el próximo GP, si se da esta situación.
Dovizioso sigue siendo el gran tapado durante todos los entrenamientos, en las quinielas de cara a la carrera suele sonar poco su nombre, pero, por el momento, está haciendo una gestión impecable de la situación. Se suele atribuir que sus resultados son, en gran parte, gracias a su propulsor, pero creo que en todas las victorias ha gestionado perfectamente los tiempos. Su moto no sólo funciona bien en la recta y aceleraciones.
El paso adelante dado por Yamana en Silverstone fue notable, pero, bajo mi punto de vista, estuvo un “pelín” por debajo de las expectativas para este trazado. Recordemos que Maverick se encuentra muy cómodo en este circuito. Acabó muy cerca de Dovizioso pero en ningún momento tuvo una clara opción de victoria. Rossi hizo un ataque desde el inicio, que responde a que todavía no tiene las mejores sensaciones para llegar al final de carrera y ser competitivo. Su ataque no le dio los frutos deseados.
El quinto en discordia, Pedrosa, estuvo muy por debajo de las expectativas durante todo el fin de semana, es verdad que incrementó su ritmo a partir de la clasificación. Sale de esta carrera a los mismos puntos del líder del Mundial que la semana anterior, pero deberá trabajar para evitar este tipo de fines de semana si no quiere descolgarse de la lucha por el campeonato. En este tipo de pistas, Dani sufre mucho con los baches y la gestión del agarre de los neumáticos.
Lorenzo puede llegar a convertirse en un buen escudero para Dovizioso en este final de campeonato, está mejorando muchísimo su ingreso en curvas. Hasta el momento, la aparición del nuevo carenado le está ayudando a encontrar mejores sensaciones con el tren delantero.
