El nuevo modelo de Triumph, que podría denominarse Street Tracker, aparece en la película Outlaws y en las fotos de la última campaña que la firma de ropa Belstaff ha realizado junto al ex-futbolista David Beckham. A tenor de las imágenes, el aspecto más destacado es el propulsor. Se especula de que cubicaría aproximadamente 1.100 cc y unos 90 CV, con la mira puesta en la BMW NineT, un modelo en el que además de imagen también se buscan prestaciones deportivas en carretera.
Mantiene la arquitectura de dos cilindros en paralelo y, aunque siguen mostrando aletas de refrigeración, incorpora un discreto radiador de agua montado en posición vertical frontal que minimizaría la temperatura del motor más que en la actualidad (aire-aceite).
Será interesante saber cuál será el calado elegido por los británicos para este motor ya que en la gama classic actual, nos encontramos con una arquitectura de 360º en sus modelos Bonneville y Thruxton mientras que la Scrambler opta por un desfase de 270º, lo que le proporciona un tacto y sonido similar a un bicilíndrico en V. Posiblemente Triumph hayan escogido éste último aunque de momento son todo especulaciones.
La estética general de la moto se asemeja a la Thruxton, con detalles como los espejos en las puntas del manillar o la parte trasera muy recortada y finalizada en un colín monoplaza.
Donde hay más diferencias con el resto de modelos Classic es en la parte ciclo. Empezando por el doble freno de disco delantero con pinzas radiales Brembo, la horquilla invertida o el doble amortiguador trasero Öhlins.
De lanzarse al mercado, y sabiendo el éxito obtenido por sus hermanas pequeñas, será una magnífica base para preparaciones de todo tipo pero también, para tener una bonita moto con aspecto clásico pero componentes actuales y divertida en carretera de curvas.