TTS Performance, la firma británica con sede en Silverstone y especializada en sobrealimentadores Rotrex, ha creado uno específico para adaptarse a cada generación de la Hayabusa y catapultar la potencia en la rueda trasera entre 300 y 360 CV. Por si de serie no tiene suficiente…
El kit se basa en un nuevo diseño de los también llamados supercargadores (por supercharger en inglés), que funciona en sentido contrario a la agujas del reloj, lo que permite simplificar su configuración y reducir costes tanto en la fabricación como en el proceso de instalación.
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A diferencia de cualquier otro compresor, la unidad Rotrex funciona prácticamente en silencio y a revoluciones mucho más altas que cualquier otro sobrealimentador. El hecho de que opere con una caja de cambios epicíclica de rodillos silenciosos significa que no solo es de mayor eficiencia, sino que también es mucho más pequeño de tamaño. Esto permite instalarlo donde antes no se podía.
La única modificación del motor que necesita es una junta más gruesa para reducir la compresión. Los inyectores requieren un pequeño ajuste y se instala una bomba de combustible mejorada y de más caudal.
La ECU obligatoriamente necesita ser revisada por TTS. Proporcionando ahora tres configuraciones básicas, con su correspondiente curva de potencia.
- A: Potencia progresiva en marchas más bajas.
- B: Plena potencia en todas las marchas.
- C: Potencia limitada.
Hasta ahora las motos de estas características y con este tipo de preparaciones mecánicas se dirigían directamente a las pistas de carreras de aceleración. Pero eso ha acabado con el nuevo kit homologable en el Reino Unido de TTS. Los ingleses recomiendan instalar un basculante más largo, para evitar que los más de 300 CV catapulten la moto hacia el cielo al acelerar bruscamente (y dejen al piloto en el suelo, de culo y con cara de no entender nada).
De acuerdo con el deseo de mantener las motos aptas para circular, el kit de sobrealimentación ha sido diseñado específicamente para no reducir la distancia al suelo en ninguna de las tres generaciones de la Suzuki Hayabusa. Además, la correa está asegurada por una carcasa de protección.
Para refrigerar la mecánica, TTS ha construido un intercooler que queda oculto debajo de la tapa del tanque de gasolina de la Suzuki. El aire forzado lo toma de las rejillas de ventilación del carenado, por lo que la moto queda tan original que parece casi de fábrica. Bueno, casi es decir mucho. Otra pieza que acompaña al kit de sobrealimentación es un depósito de aceite extra para la refrigeración del compresor y, un indicador del nivel de aceite.
Para los modelos de la primera Hayabusa Gen 1 (1999-2008), el kit le otorga a la moto 300 CV. Para la segunda y tercera (Gen 2 2008-2018 y Gen 3 2021 en adelante) la potencia aumenta hasta los 360 CV.
Para hacernos una idea, una Suzuki Hayabusa de segunda generación con el kit TTS instalado logró un tiempo en el cuarto de milla de 9,1” y 260 km/h de velocidad máxima. Va rápida, sí.
Los precios varían de una generación a otra. Comienzan desde 4.560 libras (unos 5.500 euros) para el kit Gen 2, con un tiempo de entrega mínimo de ocho semanas, ya que cada kit se fabrica bajo pedido y de manera artesanal.
