Tras el estado del mercado de las dos ruedas que sigue su descenso en el número de ventas, ahora se le suma que el sector se va a ver más perjudicado por el incremento en los impuestos sobre el CO2.
Siempre pagamos los mismos y no sólo eso sino que detrás existe un mercado que comienza a hacer aguas. Si nuestro gobierno se supone que debería potenciar los sectores con cualquier tipo de ayuda, como aquellas que favorecen a los productores menos contaminantes, también debería ser consciente de que las repercusiones de estas medidas afectan a terceros o a los pequeños empresarios y trabajadores que poco a poco se verán salpicados por medidas recaudatorias de este tipo.
Como este país en el que vivimos y las instituciones que lo representan cada vez demuestran que les importan más cuestiones tales como las dudosas cifras de descenso de muertes en carretera y que siempre vienen achacadas a los motoristas, ahora las tablas de aplicación del nuevo impuesto es específica para moto. Vamos, que los coches resulta que emiten un humo distinto a los de nuestras motos, increíble.
Aquellas motos que emiten menos de 80 gramos por kilómetro recorrido, pagarán el mínimo de 4’75% las que estén entre 80 y 100 gr, un 9’75% las que estén entre 100 y 120, y el tipo máximo 14’75% aquellas que sobrepasen los 120 gramos y tachaaaaannnn todas aquellas que tengan más de 100 CV de potencia, independientemente de su nivel de emisiones. Es decir que en el fondo les importa un pimiento las emisiones de CO2, esto es una persecución y amigos somos la presa.
Pero ahora viene lo divertido, en comunicado oficial se expone lo siguiente como escusa a esta subida: para combatir la elevada siniestralidad asociada a este tipo de vehículo, algo que ni las propias cifras de la DGT confirman y que es sólo una “percepción.
La caída prevista de ventas de las dos ruedas se estima en 20% para este 2008 y claro para fomentar las ventas deciden subir los impuesto, ¡¡¡QUE GRAN PAÍS!!!.
Fotos Edu Peiro
