Así, es, Polini lanza este dispositivo como «control de tracción para Yamaha TMAX» pero en realidad su función es precisamente la contraria, es decir, desactivar dicho sistema. La explicación es sencilla: cada vez que se da al contacto en un TMAX de las últimas generaciones (530 y 560) se activa el control de tracción por defecto. Pero si el motor o el variador han sido preparados, el motor puede tener subidas de régimen más rápidas de lo que la centralita original tiene previsto, y al pensar que se trata de una pérdida de tracción puede limitar la aceleración.

Es decir, supongamos que por ejemplo que montas un variador más agresivo, con rodillos ligeros que permiten al motor subir más de vueltas y mejorar la aceleración. Te puedes encontrar que la centralita corta cuando aceleras fuerte… sin que haya pérdidas de motricidad. Solo porque la relación entre revoluciones del motor y de la rueda ha cambiado. Para evitarlo, Polini propone instalar este dispositivo que cuesta unos 150 euros. Se instala sin cortar cables ni modificar el cableado original, de forma que se puede volver a la configuración estándar sin problema. Y dispone de un interruptor, de forma que si queremos podemos activar el control de tracción en caso necesario. Polini ofrece además un amplio abanico de piezas para la preparación o personalización del TMAX, que puedes ver en su página web.