Sin duda fue una de las motos más aclamadas en el EICMA 2018. En su momento, os hablamos de ella ya que la MV Agusta Superveloce no nos dejó indiferentes. Sin duda, la firma de Varese sabe perfectamente cómo dar en el clavo con sus diseños, siendo capaz de reinventarse una y otra vez.
Ya en su momento dijeron que el prototipo finalmente vería la luz como moto de (pequeña) producción, con una fabricación prevista para mediados de 2019. Y han cumplido pues ya han hecho público que la Superveloce se empezará a comercializar el año que viene.
Si en su momento se te pasó de largo, algo imperdonable, te volvemos a contar lo que MV Agusta nos contó en su stand de Milán. La base es la de una MV Agusta F3 800, con el mismo chasis así como las suspensiones y los frenos. Incluso la postura de conducción será muy similar entre ambas.
Sin embargo el motor será ligeramente diferente ya que aunque compartirá la elementos, se rediseñará para aumentar su potencia máxima. Esto incluye el escape en el que ahora se ha optado por un sistema asimétrico 3-1-3 con dos silenciosos en la derecha y uno a la izquierda, una solución que ya empleó en su pasado glorioso en las carreras.
El carenado cuenta con reminiscencias a las motos que fabricaba MV Agusta en los años 70. El prototipo estaba fabricado completamente en fibra de carbono (seguramente se mantenga en la versión de producción). El frontal y el colín son muy afilados, con detalles retro como la cúpula amarilla, el protector del faro o el tapón del depósito, que incluye la mítica correa de cuero que se usaba para anclarlo al chasis.
La parte moderna viene del lado de la instrumentación TFT a color, iluminación full LED delante y detrás o un colín que, aunque monoplaza, permite convertirlo para poder llevar en él a un pasajero de forma ocasional.
Como dicen los italianos… Bellissima…