En su rueda de prensa de final de año, Carlos Wang de KYMCO España ha detallado cómo ha sido este difícil 2020. Vimos cómo las ventas de desplomaron los meses de marzo y abril, hasta casi cero, y cómo en mayo empezó una recuperación que llevó a un verano de récord hasta septiembre. Ahí empezó una segunda recesión, debida a las incógnitas y nuevas restricciones de movilidad: se generó una «aversión al consumo» en sus palabras que posiblemente durará todavía varios meses, hasta la próxima primavera incluso. El efecto ha sido parecido, para el mercado de la moto, a una muy mala meteorología (lluvias constantes y frío).
Unas cosas con otras, el año viene con una pérdida de un 11 por ciento aproximado respecto de 2019. Es posible que en diciembre haya una subida pero será puntual debido a ofertas o matriculaciones de unidades Euro 4, no por la tendencia real del mercado, que es negativa. KYMCO no espera ahora que el año 2021 supere al 2019 como otras previsiones sí apuntaban. De todas formas el año sí ha sido bueno para ellos: han perdido menos que las dos únicas marcas que les aventajan (Honda y Yamaha) acercándose a ellos. Lo explica que el mercado es mayoritariamente scooter (55 por ciento), segmento donde ellos están con fuerza. La mobilidad urbana «manda» en el mercado de la moto.
Otra buena noticia para KYMCO ha sido el incremento en usuarias (mujeres): en 2020 han duplicado su cartera de público femenino, gracias a subidas en el porcentaje de clientas en ciclomotor y sobre todo en scooter 125. Casi uno de cada cuatro KYMCO 125 se han vendido a una mujer en 2020. Por último, Carlos Wang aprovechó para desvelar que KYMCO volverá a vender Quads/ATV en España. Fue un mercado que dominaron en la época del «boom» de estos vehículos, entre 2004 y 2006, antes de que los accidentes con ellos y las restricciones posteriores los liquidaran, prácticamente. Traerán tres modelos MXU de 300 a 700, que llegarán entre la primavera y verano próximos, y pretenden situarse como líderes de ese mercado en 2022.
