Bajaj, el gigante indio de la automoción, es la nueva propietaria de Vincent Motorcycles. Esta es la noticia que ha saltado hace unas horas a nivel internacional y que ha puesto a más de uno a pensar. Suponemos sobre todo a los CEO de otras marcas europeas actuales que tomaron esos mismos derroteros de un tiempo a esta parte, llámense Benelli o Royal Enfield, por ejemplo. De este modo estaríamos ante el muy probable regreso de una de las marcas británicas más legendarias de todos los tiempos. Pero aún hay más.
El meollo del asunto no es solamente que Bajaj se haya hecho con los derechos de la firma inglesa. La cuestión es que este hecho no se ha producido ahora, si no hace ya cinco años. Más concretamente en el verano de 2017 como así lo atestigua unos documentos de registro de la propiedad por parte de los nuevos dueños que se han filtrado recientemente. En ellos se ve claramente la adquisición de los derechos de Vincent a su propietario en ese momento, David M. Holder.
Llegados a este punto nos surgen una serie de dudas de por qué Bajaj no ha comunicado nunca este hecho y cuáles son los planes de futuro que puede tener bajo la manga para la marca británica. Por otro lado, y teniendo en cuenta el camino que han seguido otras marcas de renombre como Benelli, actualmente en manos del grupo chino QJMotor o Royal Enfield que está de plena actualidad desde que fuera rescatada por capital indio. También Jawa, la marca checa que fue recuperada por Classic Legends, que a su vez forma parte del complejo empresarial de Mahindra, otro de los titanes indios en esto de la automoción.
Además, hay que tener en cuenta otros factores fundamentales en esta ecuación. El primero de ellos es el acuerdo que firmó recientemente Bajaj con Triumph del que se espera empiecen a nacer nuevos modelos a partir de la próxima temporada. Por otro lado, como todos sabemos Bajaj es la propietaria del 49,9% de KTM AG, por lo que tiene acceso a todas y cada una de las plataformas que se emplean en la marca austriaca, así como las de Husqvarna y recientemente GASGAS.
Todo esto da como resultado que Vincent Motorcycles tenga muchas cartas para volver por la puerta grande. No sabemos si fabricando las motos más veloces del momento, como si hacía entre mediados de los cuarenta y comienzos de la década de los cincuenta con sus Black Shadow y la Black Lightning. Lo que sí es casi seguro que, al igual que ha pasado con Royal Enfield, el mantener la filosofía y concepto que empleaba Vincent antaño, en las posibles motocicletas de nueva hornada que pudieran llegar de la mano de Bajaj, le haría ganar muchos adeptos y posibles clientes ¿no creéis?