Nos escribe Marcos con una pregunta sobre su KYMCO Super Dink 125 recién comprado: le sorprende que al circular a 8.000 revoluciones va a una velocidad de 80 km/h y pregunta si es normal o a qué podría deberse.
Nos quedamos sin saber si has comprado tu KYMCO nuevo o usado, aunque ya te podemos ir adelantando que sí, que es bastante normal que se revolucione tanto para una velocidad relativamente moderada como son 80 km/h. Piensa que a fin de cuentas es un 125, que su velocidad máxima ronda los 110 km/h y que a 80 km/h ya estás cerca de esa máxima. A la velocidad máxima el motor estará en unas 9.500 vueltas (quizás 10.000 indicadas) con lo que, sí, a 80 km/h tiene sentido que indique 8.000 rpm.
Los primeros Super Dink llevaban un desarrollo algo más largo, es decir más velocidad para las mismas revoluciones. Alcanzaban, sobre todo en condiciones favorables (viento a favor o ligera cuesta abajo) algo más de 110 km/h reales, que según la unidad podían ser 130 indicados. A esa velocidad el motor llegaba a las 10.000 vueltas reales (que de nuevo podrían ser algo más indicadas). Posteriores versiones, sobre todo la actual (Euro 4), pensamos que han tenido un ligero recorte de desarrollo para compensar la ligera pérdida de potencia que la propia marca reconoce en el motor. Así, la aceleración que es lo que “notas” se ha mantenido parecida, y sólo en vías rápidas aprecias que llegas antes al final del motor, a una velocidad más reducida (unos 100-105 km/h reales), y un régimen algo inferior (por encima de 9.000 rpm apenas estira más). Pero, hasta aquí, todo normal.
Si tu moto fuera usada, es decir tuviera bastante kilómetros, ¿qué podría originar un régimen de motor demasiado elevado? Pues sería posible, sí, que el desarrollo final se hubiera acortado por desgaste mecánico. Las transmisiones fijas (cambio y cadena) no cambian la relación de giro entre motor y rueda trasera, da igual el uso. Pero los variadores funcionan por fricción, por la presión lateral de unos platos cónicos sobre una correa. A medida que la correa acumula kilómetros, se desgasta y se hace más estrecha (unos milímetros), por eso hay que cambiarla en plazo o se corre el riesgo de que se rompa. Cuando pierde espesor el desarrollo se acorta: no llega tan arriba en el plato conductor, el que sería el plato de una bici equivalente.
Además, los rodillos del variador también se desgastan: pueden dejar de empujar la parte móvil de ese plato hasta el final del recorrido, y además al aligerarse obligan al motor a subir más de vueltas para accionar el variador. Resumiendo: un variador a medida que se desgasta revoluciona más el motor. En cuánta medida depende de la moto y su diseño, pero es una forma de darnos cuenta que ha llegado la hora de reemplazar la correa y echar un ojo a los rodillos.
