El Gran Premio de San Marino de Moto2 tuvo un final polémico porque Augusto Fernández pisó la parte prohibida (verde más allá del piano) del circuito para su maniobra de adelantamiento final. Además esa frenada bloqueó a Di Giannantonio, que perseguía su primera victoria y en el circuto «de casa»… El equipo Speed Up acabó muy enfadado y reclamaron inmediatamente, pero Dirección de Carrera dio por bueno el resultado y Fernández subió a lo más alto del podio. Se argumentó que al ser la última vuelta la acción no se consideraba ilegal.
Sin embargo parece que la comunicación de Dirección de Carrera con el equipo reclamante dejó algún cabo suelto el domingo, y estos presentaron un recurso, que se hizo público el jueves, ya con todas las partes en MotorLand para la disputa del siguiente GP. El jueves mismo, pocas horas después de recibir este recurso, se reunió el comité de Recursos de los Comisarios de la FIM. El recurso del equipo fue aceptado y lo estudiaron los comisarios de la FIM (Bill Cumbow y Freddie Spencer), además de los representantes de ambos pilotos. Revisaron las normas sobre los límites de la pista, el método para juzgar los excesos, y la telemetría de Fernández en la que se observaba que, al pisar por fuera en la curva 12, perdió ventaja en velocidad y distancia.
Por parte de Speed Up, reclamaron que Dirección de Carrera sea más estricta con los límites de la pista en la última vuelta, porque esto puede dar lugar a finales de carrera tanto o más polémicos. Al final le dieron la razón a la decisión del domingo y el resultado no cambia. Por cierto que, preguntado por este tema, Marc Márquez también afirmó que hay que ser más estricto en la última vuelta y que él sabía que no debía «pisar fuera» al intentar superar a Quartararo porque le habrían penalizado. Aunque es bueno recordar que esa opinión de Marc pueda tener algo que ver con que en este caso ha ganado el que ahora es rival de su hermano Álex por la provisional de Moto2…
