Responde al nombre de Yamaha XV950 ‘Ultra’, y su apellido le viene que ni pintado porque va más allá de las formas que solemos estar acostumbrados a ver. Y es que es igual de poco convencional que el fundador de GS Mashin, Tom Mosimann, que ha creado esta moto fiel a su estilo de elaborar modelos diferentes pero sin que por ello pierda ni un ápice de su funcionalidad.
Con una clara inspiración en la arquitectura gótica, la Yamaha XV950 pasa ahora a tener un aspecto bajo gracias a unas grandes llantas, cerrados semimanillares y una línea descendente muy marcada desde el faro hasta el colín trasero.
Shun Miyazawa, director de productos de Yamaha Motor Europe comentaba sobre esta moto: “Me encanta lo que ha creado Tom partiendo de la XV. Estoy muy contento de que, a pesar de apostar por un look verdaderamente radical, comparta nuestros principios de que una moto custom debe conservar la función más importante: la conducción. Ha mantenido el alma de la XV950 y la ha envuelto en un look auténticamente original sin cortar ni soldar el chasis. Y lo que resulta no menos impresionante es que el 95% de su trabajo lo hace con solo unas cuantas herramientas, una amoladora, un saco de arena y un martillo”.
La base de la preparación es chapa de acero de 1,5 mm trabajada a mano, tanto para la creación del carenado frontal como del depósito de combustible, para el cual se utiliza la parte inferior del depósito original de la XV950. En el interior del frontal, se ha alojado un faro Bates y unos intermitentes Highsider.
En la parte trasera llama poderosamente la atención el doble amortiguador prototipo que firma K-Tech a partir de sus unidades Bullit, lo que le otorga una fantástica presencia y dinámica. Por encima, el colín cuenta con un piloto integrado Shin Yo mientras que el asiento ha sido completamente tapizado a mano por Jose Rey Saddlery.
Volviendo al frontal, la tija superior es un trabajo casi de orfebrería hecho por Asic Robotics, donde la forma se ha depurado al máximo sin que ningún taladro estropee el conjunto. Por encima de ella, un único reloj digital muestra una escueta información.
Para las llantas se han usado los bujes originales junto con un radiado completamente nuevo para conseguir una medida de 18 y 21 pulgadas delante y detrás. Sorprende que el ABS siga siendo perfectamente funcional. Por último el trabajo de pintura es muy particular, con una parte central negra enmarcada por sendas franjas blancas y amarillas.
