No es la primera ni la última vez que un motor de Hayabusa pasa a ser la pieza clave en una restauración, en una preparación o en una modificación. Tampoco es la primera vez que nos hacemos eco de ello y, tampoco es la primera vez, que nos quedamos alucinando con el trabajo y el resultado.
Nos “colamos” en el taller de Vasily, un auténtico enamorado del motor de Hayabusa y que, además, sabe trastear con él para conseguir sacarle toda la potencia posible. Da igual lo que se proponga, con talento, material y conocimiento, vemos que es lo suficientemente habilidoso como para ir dando forma al proyecto.
En esta ocasión decidió coger un motor de Hayabusa y colocarlo dentro de un Yamaha Raptor que había perdido su propio motor. De hecho, el proceso de creación está documentado a través de dos vídeos en los que vemos las peripecias del bueno de Vasily.
Pero es que no conforme con ponerle el motor, que obviamente se ve abultado y grande dentro del Raptor al que tuvo que modificar para dar cabida, decidió que le iba a poner un turbo al motor de Hayabusa.
Poner el motor de Hayabusa no era suficiente, ¡debe tener turbo!
Curiosamente las preparaciones de Suzuki Hayabusa incluyen en muchas ocasiones o compresores o turbos que le dan más potencia. Y, como no podía ser de otra manera, en la segunda fase de la preparación Vasily decidió ponerle un turbo a su motor.
Tal como comentábamos antes, el espacio en el interior del Raptor es reducido, así que el youtuber tuvo que diseñar y crear el sistema para que se terminase colocando por delante de las protecciones. El trabajo en time lapse muestra que de sencillo no tuvo nada, aunque la pericia de Vasily volvó a quedar demostrada.
También preparó un depósito de gasolina de aluminio, aunque para rematarlo sí necesitaba ayuda. Y es que por mucha mañana que uno tenga a veces las herramientas no alcanzan para conseguir lo que se pretende.
Todavía le queda por terminar de transformar el Raptor con motor de Hayabusa, pero la cosa promete y ¡suena de lujo!