Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

Prueba Suzuki GSX-S1000 2021

Diseño radical
Fotos: Suzuki/J.Martínez
Suzuki renueva su GSX-S1000 con una motorización Euro 5, estética más agresiva y mayor equipamiento con el objetivo de seguir siendo una de las maxinakeds más equilibradas y efectivas para uso en carretera.

La Suzuki GSX-S1000 2021 es la segunda generación de la maxinaked japonesa (debutó en el catálogo en 2015), el buque insignia de una gama reforzada por la Suzuki GSX-S950 limitable para carnet A2 (como sustituta de la Suzuki GSX-S750) y completada por las SV 650 y GSX-S125. También sería lógico que a corto plazo y con la misma plataforma se introdujera una versión sport-touring que según rumores denominarían GSX-S1000T (sustituta de la actual F). 

Por potencia, las principales rivales de la GSX-S1000 serían la BMW S1000R, Honda CB1000R y Yamaha MT-10, si bien la ausencia de módulo inercial IMU la dejaría sola frente a la segunda.

CARACTERÍSTICAS Y EQUIPAMIENTO

Además del rediseño general de la carrocería, mucho más personal y agresiva, junto a las ópticas hexagonales superpuestas y los adhesivos texturizados en imitación carbono, los principales cambios de esta Suzuki pasan por la adaptación del motor a la normativa Euro 5, aprovechando para mejorar la electrónica. Así, mantiene el fiable propulsor tetracilíndrico en línea de carrera larga (73.4 mm x 59 mm) de la GSX-R1000 K5 (2005-2008), una mecánica compartida con la Suzuki Katana que se adapta perfectamente a la filosofía fun de esta bestia azul. Suzuki declara 152 CV a 11.000 rpm, 106 Nm a 9.250 rpm y una aceleración 0-200 m de 6,6 s. Escape, cuerpos de acelerador, airbox o árboles de levas de han optimizado. 

Tampoco falta acelerador electrónico, embrague asistido anti-rebote (SCAS), cambio semiautomático bidireccional, triple modo de conducción (A-B-C), control de tracción (5 niveles de intervención, desconectable) y ABS, además de tecnologías propias de la marca como el sistema SESS (Suzuki Easy Start System) para facilitar el arranque, el LRA (Low RPM Assist) para minimizar la posibilidad de calar en moto al salir desde parado o la válvula SET (Suzuki Exhaust Tuning) que controla las ondas de presión del escape para mejorar la combustión a bajas revoluciones.

La parte ciclo es la que menos cambia, confiando en un robusto chasis doble viga de aluminio con basculante reforzado del mismo material y suspensión Kayaba (horquilla invertida 43 mm multirreg. y amortiguador con bieletas reg. ext./precarga). Neumáticos Dunlop Sportmax Roadsport2, pinzas de freno delanteras radiales Brembo, instrumentación monocolor full-LCD de GSX-R1000R, iluminación full-LED, depósito de 19 l. y 214 kg llena completan el conjunto.

suzuki_gsxs1000_2021_10

EN MARCHA

La Suzuki GSX-S1000 es una de las nakeds más cómodas del mercado, con una ergonomía muy estudiada que juega a favor del conductor. En esta segunda generación se ha cambiado manillar (2.3 cm más ancho y con las puntas elevadas/retrasadas 2 cm) y asiento (más apoyo y libertad de movimientos) que logran más comodidad y confianza. En esta moto te sientes muy integrado y, con una distancia asiento-suelo de 81 cm, llego perfectamente al suelo con mi 1.80 m de altura.

Acariciar el botón de arranque es suficiente para que el motor cobre vida. Una vez en marcha, notas la ganancia de par en la franja baja-media del cuentarrevoluciones. El motor revisado es un prodigio de linealidad, finura y contundencia desde 2.000 hasta 11.000 rpm, un placer para rodar cómodo en tu carretera favorita. No hace falta jugar mucho con el cambio, pues tiene fuerza en todo momento y a todo régimen. La respuesta a las insinuaciones es instantánea, sin perder suavidad, tacto y feeling deportivo. La sensación de que el motor nunca se acaba es constante, mucho poderío y recuperaciones instantáneas.

suzuki_gsxs1000_2021_02

El revisado pack de ayudas a la conducción es más sensible y preciso que el anterior, con un control de tracción bien escalonado y reactivo en nivel 5 (el más intrusivo), ideal para condiciones de lluvia. El embrague evita bloqueos innecesarios en reducciones fuertes mientras que el modo de potencia A te obsequia con todo el potencial de la moto, siendo el más directo de los tres.

A nivel chasis el conjunto cumple con creces, con una estructura sólida que apuesta por la estabilidad sin perder la agilidad que se espera en una moto de este tipo, aunque rebajar en 14 kg el peso total sería rizar el rizo. Precisión y confianza sobre cualquier estado de asfalto, apoyándote ahora en un manillar que facilita tus movimientos y consigue que manejes la moto como si fuera una 750. Respecto a la frenada poco que objetar, con un excelente tacto y mordiente de las pinzas Brembo delanteras (Nissin trasera).

suzuki_gsxs1000_2021_09

Lo último

Lo más leído