A lo mejor te parece aburrido ir a ver museos, pero ¿y si lo que exponen son motos, piezas de motos y monos de cuero? Pues eso es lo que vas a encontrarte en Venecia estos días: en la Bienal de Arte, en su pabellón central, hay una exposición de Alexandra Bircken que entre otras obras cuenta con varias dedicadas a las motos. Tenemos una Aprilia RSV Mille seccionada y abierta, varias Honda (diríamos que VF 750 o quizás 500) que han sufrido un curioso cambio «arriba y abajo», una Ducati de Superbike también mostrando sus «tripas»… Y también varios monos de cuero de carreras, expuestos como quizás nunca habríamos pensado: como trofeos de caza.
Esta artista alemana, Alexandra Bircken, es conocida por usar elementos sencillos y cotidianos para sus obras: se hizo famosa por las esculturas hechas con trozos de madera y ramas encontradas por el suelo del bosque. Pero si tuvieras sus manos (y su creatividad) y te gustaran las motos… ¿qué podría salir? Pues quizás lo que está exponiendo en la Biennal de Venecia, una exposición dedicada al mundo de las motos de la que ya había expuesto algunos elementos anteriormente en otras galerías. La moto de campo seccionada y puesta en el suelo, con los espejos que la reflejan para multiplicar su presencia, nos ha parecido lo más llamativo. O los monos que quizás sean lo más sorprendente y una forma diferente de tener uno expuesto (una vez que no está en uso)… La artista dice que las motos abiertas o los monos representan a la vez la fuerza y la vulnerabilidad de las dos ruedas.