Si hace apenas unos días hoy os mostrábamos como sonaba la futura Honda Hornet, hoy podemos contaros algunos detalles que ha dado a conocer la marca nipona sobre cómo será el propulsor que montará su próxima naked deportiva. Se trata, como ya suponíamos, de un bicilíndrico en paralelo completamente nuevo. Este cúbica 755 cc y equipa 8 válvulas con sistema Unicam. La potencia declarada será de 90,5 CV a 9.500 rpm, junto a un par máximo de 75 Nm a 7.250 vueltas.
Con este propulsor el carácter de la nueva Honda se verá reforzado, tal y como quiere la propia marca, en la parte media y alta del cuentavueltas. De este modo nos encontramos ante una motocicleta que brindará al usuario altas dosis de diversión, pero sin renunciar a la usabilidad y versatilidad que estila la marca. Todo se verá culminado con el sonido característico de una mecánica que equipará un cigüeñal calado a 270º, además de un sistema de escape acorde a la filosofía del modelo.
Ya en mayo pudimos ver tres bocetos sobre las líneas generales que marcarían la silueta de la nueva Hornet. Ahora está más cerca que nunca de convertirse en toda una realidad. El nuevo propulsor además destaca por ser compacto y ligero, haciendo honor a la genética heredada de las versiones anteriores del modelo. Fuyuki Hosokawa dirigente de los test llevados a cabo en el proyecto y líder en el desarrollo de la CBR1000RR-R Fireblade nos comenta:
“La Hornet ha sido siempre una motocicleta muy especial para Honda. Unas prestaciones excitantes y adictivas siempre se han combinado con una manejabilidad ágil y ligera. Antes de comenzar este proyecto, pensamos muy detenidamente qué tipo de prestaciones queríamos ofrecer al motorista. Sabíamos que era esencial mantener la clásica «pegada» de potencia de la Hornet y, al mismo tiempo, como una Hornet de nueva generación para los tiempos modernos, queríamos que el motor tuviera una entrega de par realmente fuerte y una sensación gratificante de «latido» a bajas y medias revoluciones.»

Y continua: «Nuestro objetivo ha sido siempre unir esto a una manejabilidad lo más ágil y ligera posible, para hacer que cada desplazamiento – incluso en ciudad – sea enormemente divertido y satisfactorio. Para conseguir el tipo de prestaciones y manejabilidad que buscábamos, sabíamos que teníamos que desarrollar un motor de dos cilindros y carrera corta totalmente nuevo, con un cigüeñal a 270°. Esto no solo proporcionaría esa pegada a alto régimen, sino también un par motor deportivo en la parte baja del cuenta revoluciones, ideal para conducir en entornos urbanos y salir con contundencia de las curvas en carretera abierta.”