Bueno, como habéis visto, mis dos primeras carreras en el Mundial no han sido muy buenas, aunque estamos trabajando duro con la moto, intentando entender el camino a seguir con la puesta a punto. Con la Moriwaki me he encontrado con un chasis algo diferente a lo que estoy acostumbrado, sobre todo en el reparto de pesos y geometría. No consigo rodar demasiado rápido, porque es complicado hacerla girar a la hora de salir de las curvas. Pero por ganas no será, estamos ahí, pensando en probar nuevas configuraciones a ver si mis sensaciones mejoran.
Barcelona fue duro, porque a pesar de que las diferencias con los rivales eran ajustadas no había manera de bajar ese último medio segundo que te hace estar en los puntos. Silverstone, era una pista nueva para mí y era difícil de trabajar con la moto, ya que ponerla a punto en un circuito que no conoces es complicado. Estaba evolucionando bien, hasta que el sábado por la mañana me caí en una curva de cuarta al perder el tren delantero. No sé a qué velocidad iba exactamente, pero calculad que aproximadamente iría a unos160km/h, y perdí algo de confianza en el entreno de calificación.
La carrera fue el diluvio universal, al final también fui uno de los que se arrastró y no acabé la carrera; pero bueno, hay que coger experiencia e intentar evolucionar.
Este fin de semana vuelvo a Barcelona para el CEV con la Suter. Espero luchar por la victoria, sería una inyección de moral para las dos próximas citas del Mundial que son en Assen y Mugello. Dos pistas increíbles a las que desde hace tiempo sueño con ir.
Antes de concluir, no quiero despedirme sin agradeceros todos los comentarios de apoyo que me dejáis en el blog. Me alegra mucho que os haga tanta ilusión como a mi mi entrada en el Mundial. Hay comentarios de gente conocida y desconocida, amigos, familia… ¡hasta gente del instituto que no veo hace siglos! ¿Por qué no os pasáis por Montmelo? Allí nos podremos ver y charlar un rato. Animaros. ¡Nos vemos en el CEV!
