Tener hambre y no poder comer es una de esas sensaciones que todos hemos pasado alguna vez en la vida. La primera fase es un cosquilleo; la segunda empieza a doler el estómago; la tercera comienza cuando empiezas a sentirte flojo, y así sigue uno sufriendo hasta que puede saciar el apetito.
Eso, o algo parecido, debió pasarle al protagonista del vídeo que, a propósito y con total conciencia, se prepara un más que interesante aperitivo con su BMW S1000R. Lo importante no es que el tipo haya pasado hambre, si no la solución que ha buscado para solucionarlo. Al amigo, que lo muestra en modo de tutorial por si alguno queréis tentar a la suerte, no se le ocurre otra idea que la de meter granos de maíz secos al escape caliente de la moto. Transcurridos unos segundos, el calor hace que los granos pasen a ser palomitas, empleando el casco a modo de recipiente.
En el vídeo no se ver si su protagonista se atreve a comérselas, pero queda claro que el invento funciona. La verdad es que teniendo en cuenta el precio de las palomitas cuando uno va al cine y el estado de las mismas, es muy probable que en el peor de los casos la calidad del producto y del aceite que se haya podido poner en contacto con las palomitas sea similar…