-Empezaste trabajando en el mundial como técnico de Showa… ¿Cómo fue la experiencia? «Hace tiempo de aquello, fue por 1994 y yo tenía 20 años. Trabajaba en un concesionario Yamaha-Fantic y surgió la oportunidad de ir al mundial. Para mí era un sueño y trabajé con Ralf Waldman, Luis d’Antin y Loris Capirossi. Dos años después entré en HRC».
-En tu trayectoria profesional en MotoGP también has tratado con Honda y Kawasaki… ¿La manera de trabajar de los japoneses es muy diferente a Ducati? «Los japoneses son más cerrados: te llega sólo el mensaje que ellos pretenden transmitir. El sistema no es diferente, pero te cuesta más entender los pequeños detalles. Con una marca que entiendes completamente sabes las virtudes y los defectos. De todas formas, el mundo está lo suficientemente globalizado como para estandarizar el proceso de trabajo, independientemente de la marca».
-¿Cuál es el piloto con el que te has encontrado más a gusto? «Con el que he conseguido más afinidad y he conectado más ha sido con Sete y a día de hoy todavía mantengo una relación muy buena con él. Con todos los pilotos me he sentido bien, he aprendido de todos ellos y he intentado satisfacer sus necesidades. Cualquiera de ellos tiene mucho nivel».
-¿Cómo ha influido el paso de Valentino Rossi por Ducati? «La falta de resultados forzó a la marca a ir más rápido de lo aconsejable, a veces Ducati se ha visto obligada a correr en lugar de andar. Nos ha hecho dudar de si estábamos haciéndolo realmente bien, pero Ducati sigue sabiendo hacer motos y Valentino en Yamaha sigue sin conseguir los resultados esperados. Quizá, no llegó a Ducati en el momento álgido de su carrera deportiva».
-¿Qué le falta a la Ducati Desmosedici para estar en el podio con regularidad? «Lo que nos cuesta a día de hoy es aprovechar convenientemente las propiedades del neumático delantero, justo en el vértice de la curva y no en la salida. La moto rompe el neumático al acelerar y no se pueden hacer las trayectorias buenas. La clave es conseguir una puesta a punto de chasis que de confianza a los pilotos justo antes del vértice de la curva».
-¿Haría falta un piloto como Stoner para que la Ducati volviera a ganar? «Los “súper-clase” siempre son bienvenidos. Stoner volvió a ganar también con Honda después de 4 años sin títulos. Ojalá pudiéramos contar con Pedrosa, Márquez o Lorenzo en un futuro».
-¿Qué destacarías de tu piloto, Nicky Hayden? «Su tenacidad y constancia. Es un piloto muy experimentado, bastante sensible y tiene un sistema de trabajo muy repetitivo que le hace evidenciar problemas a los que otros pilotos no llegarían».
-¿Cómo se planifica la estrategia de carrera de cara a un GP? «Lo primero es ser consciente de cuál es tu objetivo real. Durante este año estamos intentando volver a ser competitivos, es decir, subir al podio. Carrera a carrera, sabes históricamente las posibilidades que tendrás en carrera y en los entrenos compruebas si esto es realmente así. Los tiempos por vuelta son los que mandan. Hay un margen de dos-tres posiciones hacia arriba o hacia abajo».
-¿Cómo ha cambiado Ducati tras la compra de la marca por parte de Audi? «Audi continúa analizando la fábrica, tras darse dos cambios estratégicos radicales: Gabriele del Torchio reemplazado por Domenicali y Filippo Preziosi por Godmeier como responsable de Ducati Corse. A nivel estratégico ya ha habido cambios pero a nivel funcional todavía no. Aunque parezca que estos dos años con Rossi han sido un desastre, si una fábrica tan importante como Audi no ha hecho cambios radicales significa que las cosas no se están haciendo tan mal».
-Además de pilotos, hay muchos técnicos españoles en MotoGP (Ramón Forcada, Antonio Jiménez, Santi Hernández, Ramón Aurín…). ¿A qué se debe este éxito? «El motociclismo siempre ha sido un deporte muy ligado a nuestro país. Fábricas como Derbi o Bultaco y aportaciones como Tombas o Cobas unidas a que la empresa que gestiona el mundial también es española ha favorecido la incorporación de técnicos españoles. Nosotros sólo hemos continuado el trabajo que otros muchos iniciaron antes».
-Marcas como Ducati, BMW y Aprilia equipan suspensiones “inteligentes” en algunos modelos de su catálogo… ¿cuándo serán habituales en competición? «De momento por reglamento está prohibido. Todas las marcas tienen recursos suficientes para desarrollar esta tecnología, pero el problema es saber lo que se subirían los costes. En una época tan complicada como la actual lo tienen que ir retrasando».
-Los neumáticos de MotoGP… ¿son ya más importantes que la propia moto? «El neumático es fundamental porque condiciona todo lo demás. Por compuesto (agarre, sobre todo el trasero) y perfil (capacidad de giro, el delantero)».
-Fuera de las carreras acabas de inaugurar Andreani-MHS Ibérica… ¿Cuál es el objetivo? «La idea es poner al alcance del usuario de calle un tarado acorde a su conducción, que las exigencias de cada uno se adapten a sus necesidades».
-¿Andreani va a estar presente en disciplinas del campeonato de España como motocross o el CEV Repsol? «Ya lo estamos haciendo. Trabajamos con los trialeros Toni Bou y Takahisa Fujinami (Montesa Honda), en el Nacional de Enduro y en la Copa de España. Iremos ampliando más poco a poco y también entraremos con los coches».
-¿Es Öhlins la mejor suspensión del mundo? «En el mundo de las motos para mí es la referencia, por tecnología».