El protagonista de este vídeo se ha trabajado bastante bien el combo para ser el peor conductor del año. Aunque toda la acción sucede en Malasia, es tal el cúmulo de barbaridades que suceden durante el vídeo que ha traspasado fronteras, y todo el que lo ve queda atónito.
Para situarnos completamente hay que decir que el accidente que podría haber pasado perfectamente en Lloret de Mar, Magaluf o Benidorm en vista de los cívicos que son los turistas que llegan cada verano, sucedió en Rawang, en el distrito de Gombak a poco más 20 kilómetros de Kuala Lumpur, la capital del país.
Como podemos observar, el coche circula literalmente echando chispas, y lo hace por dos motivos obvios. El primero porque está arrastrando una moto desde, al menos, 500 metros. Eso es lo que dicen los testigos de la situación. Pero además es que circula sin los dos neumáticos del lado derecho, además de apreciarse algún daño extra al coche que podría ser producto del atropello a la moto.
Por suerte el conductor de la moto no sufrió lesiones de consideración
Al parecer y por fortuna, el conductor de la moto no sufrió lesiones de consideración, algo que no podemos decir de su pobre moto que habrá quedado para el arrastre. Además, según indicaron los presentes, el conductor mostraba claros síntomas de estar ebrio, aunque desconocemos si realmente lo estaba o no, porque no hay constancia de que la policía lo detuviera.
Ya hemos visto en otras ocasiones que estas situaciones se pueden dar incluso por problemas médicos de los conductores. Pero incluso en ese cas,o y aunque fuera por un tratamiento médico bajo el cual no se puede conducir, no hablaría mucho mejor de las virtudes del que es, por el momento, el premio al conductor del año 2024. Esperemos que nadie sea capaz de igualar tamaña indiferencia por la seguridad propia y ajena.