Hace dos semanas os adelantábamos la ‘cazada’ de la última evolución en el modelo maxinaked de Aprilia. Aquellos test realizados por Lorenzo Savadori en el circuito de Imola son refrendados ahora por Aleix Espargaró a los mandos de la nueva «bestia» naked en el Red Bull Ring de Austria pues sólo se comercializará en versión de carreras y venta por internet. Las sinergias con la exclusiva RSV4 X 2019 están claras: si ya tenían la Superbike, ¿por qué no desnudarla? El departamento de competición Aprilia Racing se ha encargado de ella.
Lo primero que llama la atención es su llamativo pack aerodinámico, con un semicarenado frontal digno de la RS-GP 20 del Mundial de MotoGP. Por supuesto, la sofisticada electrónica APRC (Aprilia Performance Ride Control) está presente en esta Tuono V4 X: acelerador electrónico RbW, triple modo de conducción (Sport, Track y Race), control de tracción (ATC), control anticaballito (AWC), control de salida (ALC), control de velocidad (ACC), limitador de velocidad (APT), cambio semiautomático up & down (AQS) y Race ABS.
Carrocería en fibra de carbono, chasis doble viga de aluminio, filtro de alto rendimiento, suspensión electrónica full-Öhlins EC 2.0, llantas Marchesini de magnesio forjado, pinzas de freno delanteras radiales Brembo GP4-MS ventiladas con bomba radial 19×16, escape de titanio con silenciador Akrapovic en carbono, instrumentación TFT a color y neumátcos slick completan el conjunto.
Desde que Aprilia lanzara su primera Tuono, la 1000 R de 2002, la escalada evolutiva de la streetfighter de Noale ha sido notable. Aquella superbike de manillar alto con motor bicilíndrico Rotax y 125 CV marcó un punto de inflexión en el segmento de las maxi-nakeds deportivas. La actualización llegó en 2006, pero no fue hasta 2012 cuando Aprilia incorporó la mecánica V4 procedente de la RSV4, con la que siempre ha compartido plataforma, si bien su cilindrada actual crece de 999,6 cc a 1.077 cc.