A sus 46 años y casi una década después de acabar su carrera deportiva en el Mundial de MotoGP, Álex Barros vuelve a la primera plana gracias a la victoria que se ha llevado este fin de semana en el Campeonato Brasileño de Superbikes.
Barros, que cuenta con siete victorias en el Mundial de 500 y MotoGP, anunció su regreso a competición la misma semana del evento para ponerse a los mandos de una BMW S1000RR de su propio equipo, el Alex Barros Racing.
En la primera de las carreras, Barros tuvo que conformarse con la segunda posición, pero ya en la segunda de las mangas, disputada el domingo en Interlagos, el que fuera piloto de, entre otros, Sito Pons, logró la victoria. Ya desde el inicio de la prueba, el piloto brasileño mostró sus intenciones, situándose segundo en la segunda curva y primero al inicio de la segunda vuelta.
Por detrás, Barros contó con la oposición de Diego Faustino, que se jugaba el título en la última carrera y que tras la avería de su principal rival, Danilo Lewis, se hacía con el incluso sin acabar la carrera. Aún así, Faustino plantó cara a un Alex Barros que terminó por hacerse con la victoria por delante de su compatriota y con el argentino Diego Pierluigi en tercera posición.
Aunque en competición estamos acostumbrados a regresos sonados, no cabe duda de que el triunfo de Barros a sus 46 años da muestra por un lado de su capacidad para seguir siendo rápido y, por otro, del nivel de un campeonato nacional que sigue trabajando para conseguir fomentar una cantera brasileña que a día de hoy no tiene representación en ninguno de los mundiales de velocidad.
