Publicidad
[the_ad_placement id="adsense-mega-2-mobile"]

A ver si me sonríe un poco más la fortuna

Fotos: LaGlisse
Ya estamos de vuelta del CEV con una segunda posición en Montmeló. No es lo que me hubiera gustado pero, después del desarrollo de la carrera, 20 puntos son mejores que ninguno.

El viernes volvía a subirme en la Suter, y mis primeras impresiones fueron: con lo bien que me sentía antes con esta moto, y ahora la noto como si me subiera por primera vez. Este fin de semana creo que lo voy a pasar jodido.

Pero a base de dar vueltas, y entreno tras entreno, fueron mejorando mis tiempos y mis sensaciones. Conseguí la pole el sábado por la mañana, sin rodar aún con confianza al límite, y por la tarde un cambio en los reglajes me hizo retroceder un poco.

Llegó el domingo y el warm up me fue bastante bien. La verdad es que me sentí con mucha confianza para la carrera, sabía que podía luchar por la victoria. Sin embargo, en la vuelta de formación de la parrilla, noté como si la moto vibrase más de lo normal, pero no estaba seguro de si era yo, porque que iba algo lento y no lo supe apreciar bien. Definitivamente tendría que haber cambiado la goma trasera, ya que me tocó una que tenía unos rebotes enormes. En otras ocasiones ya nos ha pasado: montamos un neumático nuevo y la moto parece que cambie totalmente: de lo que rebota no se puede ni inclinar. Pero claro, hasta el momento esto sólo nos había pasado en entrenamientos, nunca en carrera como en esta ocasión.

Nada más empezar la carrera vi que no podía tener un paso por curva rápido, y que se me iba a complicar el asunto.

Además en la vuelta tres, a final de recta, la moto me pegó un patinazo de delante al forzar el giro, que no sé ni cómo aguanté en pie. ¡Se me congeló la sangre! y 5 curvas más adelante casi me salgo en otra curva. De golpe me vi el octavo y pensé: hoy lo tienes jodido para ganar, intenta hacer lo máximo y quedar segundo para no perder demasiados puntos con Jordi. Por suerte acabé segundo, pero tomando algunos riesgos para que no me alcanzara Koyama.

Ahora toca ya pensar en Albacete, a ver si me sonríe un poco más la fortuna, porque esto de las gomas da mucha rabia. Pero qué le vamos a hacer, es una cosa que no hemos podido controlar y se nos ha escapado.

¡Ah! Ahora me voy a Assen y luego Mugello, dos pistas increíbles que no conozco, pero de tantas veces que he visto las carreras del mundial es como si me las conociese. Veremos cómo avanzamos con la Moriwaki, os tendré informados si hay novedades.

¡Gracias por vuestros ánimos! ¡1 abrazo a todos los 31!

Relacionados

Lo último

Lo más leído