La fecha mágica fue el pasado 10 de abril, cuando oficialmente quedaba derogada la Ley que impedía que se disputasen Road Races (o Road Racing) en las carreteras inglesas. Ha sido un camino difícil ya que hasta ahora y en caso de querer celebrar alguna, era necesario un permiso especial expedido en el Parlamento, pero por fin el Departamento de Transporte ha accedido a que se puedan celebrar.
La potestad para llevar a cabo este tipo de competiciones queda en poder del ACU (Auto-Cycle Union, algo así como la RFME española), encargada de organizar y gestionar todas las competiciones relacionadas con el motociclismo. Ellos son los encargados de reunirse con las autoridades locales, policía y demás estamentos con el fin de hacer que la competición sea completamente segura, quedando en manos de estos estamentos la última palabra sobre su realización.
Fue en 2014 cuando se empezó a intentar cambiar la normativa, consiguiendo que la gran mayoría de los 6.000 estamentos que podrían verse involucrados en ello tales como policía, autoridades locales, organizaciones, etc; estuviesen de acuerdo en la celebración de las Road Races.
Gary Thompson, Secretario General de la ACU y Secretario en el Tourist Trophy declaraba que “se ha hecho un montón de duro trabajo para conseguir que esto suceda. El trabajo realizado con la MSA (Asociación de Deportes de Motor) y el Departamento de Transporte, ha hecho que se pueda poner esta legislación de manera que se consiga una gran mejora para celebrar Road Races en este país.”
“Lógicamente esto hará que las Road Races sean más atractivas a medida que vayan surgiendo nuevas oportunidades, pero también tendrá un impacto económico positivo en aquellas áreas que organizan Road Races en carreteras públicas cerradas, lo cual se convertirá en una gran ventaja para las carreras de motos y también para aquellas áreas que quieran acoger tales eventos.”
