Los compañeros de Cycle World han tenido el placer de poder probar la Harley-Davidson Screamin’ Eagle Road Glide Special, creada para competir en el MotoAmerica King Of The Baggers, una moto ideada cuando desde MotoAmerica pensaron en crear el año pasado un campeonato nacional empleando el las Harley-Davidson Eagle Road Glide como base, nadie se imaginó que aquello llegaría a buen puerto y que un año después esa misma competición pasaría de tener tres pruebas a lo largo del año, a tener seis.
Pero la realidad es que tras la temporada pasada, donde Kyle Wyman, piloto de Superbike en el campeonato MotoAmerica, tras las tres pruebas que se disputaron durante la temporada se hizo con la victoria en este MotoAmerica King Of The Baggers, la organización decidió este año doblar el número de circuitos donde se celebraría esta competición, pasando a las seis carreras actuales para este 2022.
Así que esta competición, que nacía de algún modo como una mera exhibición, se ha convertido de un año para otro en un referente en el país norteamericano, con la consiguiente repercusión a nivel internacional y el nuevo reto que ha supuesto para la fábrica de Milwaukee, que comenzó este proyecto como algo secundario pero que con el tiempo se ha convertido en una prioridad para la marca estadunidense, fabricando una moto aún mejor y con un rendimiento sorprendente a pesar de su mastodóntica imagen.
MOTOR
En este apartado se ha configurado un bloque a base del catálogo de piezas del que dispone la marca. Denominado Screamin’ Eagle Milwaukee-Eight 131 Performance, el portentoso propulsor que cubica 2.146 cc, ha visto aumentada su compresión, contando con culatas únicas por cilindro. Se ha incrementado el cruce en sus árboles de levas y ha sufrido una profunda modificación en el sistema de inyección electrónica.
Por otra parte el equipo de refrigeración también ha sido fruto de profundos cambios para poder soportar el incremento de giros en el motor, subiendo ahora por encima de las 6.000 rpm y debiendo además de aguantar durante un largo periodo de tiempo un ritmo muy alto. Para ello se han modificados las aletas de los cilindros, se ha incorporado un radiador de aceite en el frontal y se ha sustituido la bocina por una toma directa de refrigeración al bloque.
El resultado son más de 150 CV de potencia a la rueda trasera, con un par máximo de 203 Nm y disponiendo de 160 Nm desde casi cualquier régimen al que giremos. Con una velocidad máxima de 259 km/h, nos podemos hacer una idea del potencial que eroga esta enorme Cruiser reconvertida a deportiva de circuito.
PARTE CICLO
En este aparatado los hombres de Harley-Davidson se han empleado a fondo. Ya sea por la calidad de los materiales empleados, en cualquiera de los elementos de esta Screamin’ Eagle Road Glide Special, como por la efectividad de los mismos. Nada ha quedado al azar en ella y todo está diseñado por y para la competición.
Prueba de ello es el uso masivo que se ha empleado de la fibra de carbono en diferentes partes de la carrocería. Toda ella a excepción del depósito de combustible está fabricada en el exótico material. A ello hay que sumarle su basculante trasero fabricado en aluminio y extraído sobre un bloque de 200 kilogramos de una sola pieza.
Todo ello hace que el peso final del conjunto se rebaje en nada menos que 90 kilogramos. El peso minimo establecido en la categoría se ha marcado para este año en 281 kilogramos que aunque, sigue siendo una cifra muy alta, queda muy bien camuflado gracias a las geometrías de la moto.
También ayuda a ello la posición de conducción, donde encontraremos un manillar ancho de una sola pieza y una especie de almohadilla adherida al tanque de combustible con la finalidad de poder tener un punto de apoyo para las rodillas en las inclinaciones y tener una mejor posición a sus mandos. Por su parte una pantalla TFT firmada por AiM nos mantendrá informados de todo lo que pasa en las extrañas de la Screamin’ Eagle Road Glide Special.
Por último y como guinda del pastel nos encontramos con unos componentes en la parte ciclo dignos de la mejor Superbike del momento. De hecho algunos de ellos, como las pinzas radiales Brembo, provienen de dicha competición. El equipo de suspensiones viene firmado por Ohlins con una horquilla delantera FGR 250 y por supuesto monta un juego de neumáticos tipo slick Dunlop KR448 y KR451 con los que se pueden llegar a alcanzar inclinaciones de hasta 55 grados, dándonos una idea de lo que es capaz este bestia Yanqui.