El Bridgestone Battlax Sport Touring T32 llegó a las tiendas el año pasado como evolución natural del T31, que todavía se mantiene en catálogo como opción más económica. Esta nueva generación de neumáticos arrancó con el T30 (2013) y T30 Evo (2015), modelos diseñados como máximo exponente de uso sport-turismo en la firma japonesa. Estos T32/T31 se complementan con el BT-023 y BT 46, cubriendo un rango de acción muy amplio para satisfacer las necesidades de todos los usuarios.
El Bridgestone T32 es un neumático con doble enfoque (deportivo y rutero para carretera) para aquellos aficionados que buscan calidad, rendimiento y prestaciones, un compromiso difícil de lograr cuando su radio de acción comprende 22 medidas (10 delanteros y 12 traseros), tres tamaños de llanta diferentes (17”, 18”, 19”) y versión GT con carcasa reforzada para las motos pesadas. En el punto de mira, rivales de la talla del Continental ContiRoadAttack 4, Dunlop RoadSmart IV, Metzeler Roadtec 01/SE, Michelin Road 6 y Pirelli Angel GT II.
El año pasado ya pudimos disfrutar de ellos en Italia, con motivo de la presentación internacional de este modelo. Ahora toca probarlo en nuestro escenario habitual de test sobre dos monturas de espíritu rutero, aunque con enfoques bien diferenciados: Honda NT1100 y BMW R 1250 GS Adventure.
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TECNOLOGÍA
El Bridgestone Battlax Sport Touring T32 es un neumático radial de sílice (Silica Rich/EX) con uno (neumático delantero) y dos (neumático trasero) compuestos nutrido de 9 tecnologías propias como la 1/3 LC (trasero más blando por los hombros y duro por el centro), UltimatEye, MS-BELT, HTSPC, RC Polymer o NanoPro-Tech. Sobre todas ellas destaca la Pulse Groove, un nuevo dibujo que combina surcos de perfil irregular con pequeñas «islas» en el cauce del surco para igualar el flujo de agua optimizando la velocidad del mismo. Su objetivo es aumentar el drenaje de agua, mejorando el agarre y la adherencia en condiciones húmedas.
NanoPro-Tech y RC Polymer reducen el calor producido durante la deformación del neumático controlando las interacciones moleculares de la goma, además de alargar la vida del mismo y optimizar su comportamiento en agua. La capa estabilizadora monoespiral MS-BELT se compone de un filamento único continuo de hilo especial que envuelve el neumático. Este diseño de una pieza elimina uniones y juntas, además de ser más ligero que las estructuras convencionales: más rigidez de rodadura, menor temperatura y más estabilidad.
Por último, el HTSPC (High Tensile Super Penetrated Cord) hace referencia al «canuto» de goma que integra 5 filamentos trenzados de acero en el cable de su cinturón para garantizar una tensión uniforme y constante. Por último, la denominación UltimatEye hace referencia a la tecnología de simulación y medición que recrea las condiciones de uso del neumático (compuesto, huella de contacto, construcción o perfil) en cualquier situación de uso.
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HONDA NT1100 DCT: EN SU SALSA
La Honda NT1100 capitanea la nueva tendencia sport-turismo, un segmento canibalizado por las monturas trail, pero que todavía cuenta con buenos adeptos a las motos 100% asfálticas. Así, aunque su corazón es el mismo de la Africa Twin, su parte ciclo está pensada para disfrutar sobre asfalto en plenitud de facultades.
Por ello, los Bridgestone T32 le van como anillo al dedo a esta Honda, calzada de origen con gomas Metzeler Roadtec 01. La menor sofisticación de la NT1100 respecto a la GS nos brinda la oportunidad de catar estas gomas con suspensión analógica, llantas de aleación de 17 pulgadas y transmisión final por cadena, en vez de apostar por suspensión electrónica, llantas de radios tubeless (delantera de 19″) y cardan. En cualquier caso, tanto el DCT doble embrague de la Honda como el quickshifter de la BMW propician unos cambios en inclinación mucho más suaves que los de una moto manual convencional, algo que redunda en la gran estabilidad de estas ruteras.
Montar en moto durante el mes de noviembre no es lo ideal a tenor de lo que la cambiante climatología puede depararte, pero realizar una prueba de neumáticos en estas condiciones es todo un acierto, pues nos permitió combinar diferentes condiciones de asfalto, temperatura y uso (en solitario y a dúo).
Sin duda, el Bridgestone T32 es uno de los mejores neumáticos para agua del mercado. Tanto si es con el asfalto bien mojado como si está parcheado, si simplemente rodamos bajo una leve llovizna que empasta y engrasa la carretera o nos enfrentamos a la hojarasca otoñal que invade la calzada, la moto ni se inmuta. Si usas tu moto todos los meses del año, apuesta por el número 32, pues su tecnología se traduce en una mayor seguridad de rodada.
Por otro lado, tanto el excelente feeling sobre el tren delantero, necesario para guiar y colocar la moto con decisión, junto a la rapidez de calentamiento de las gomas, sorprenderán al más experimentado y terminarás circulando sobre agua más rápido y confiado que nunca. La forma de la carcasa también facilita el guiado de la moto, más natural y predecible que con el Roadtec de serie.
BMW R 1250 GS ADV: ¿POR QUÉ NO?
Si asumes que la moto que conduces está condenada a calzar exclusivamente neumáticos del mismo segmento al que pertenece, te equivocas. Sobre el papel, la GS encaja perfectamente con los nuevos Bridgestone AT41, como ya pudimos comprobar en nuestra prueba a fondo del pasado mes de julio. En esta ocasión, vamos a dejar a un lado el diseño, los tacos bajos, el concepto trail, la tierra y los Michelin Anakee Adventure de origen para potenciar el lado más asfáltico de una maxitrail tan popular como la montura alemana. Y es que todos somos conscientes de que el 70% de las motos matriculadas en este segmento no se usan para la práctica del hard-trail, así que, con más razón.
Ese proceso de «asfaltizado» de nuestra R 1250 GS Adventure se corona al montar los T32 sí, pero cabe mencionar que nuestra unidad de pruebas dispone del kit de reducción de altura opcional que BMW ofrece para mejorar la accesibilidad a este modelo. Bien es cierto que las geometrías de esta versión son las más radicales del mercado, sin olvidar las particulares sensaciones que nos transmite su equipo de suspensión alternativo Telelever/Paralever. Un buen cóctel donde las sorpresas están aseguradas.
Nunca pensé que una suspensión «recortada» en conjunción con estas gomas (presiones de origen, 2.5 delante y 2.9 detrás) pudiese destapar una GS tan salvajemente efectiva y precisa. Cabe destacar que, independientemente de «achatar» levemente la moto y con el asiento de origen en la posición más alta, el centro de gravedad también baja lo que, unido al rendimiento de los T32, propicia un comportamiento mucho más rápido sin perder estabilidad.
La agilidad de esta moto con esta configuración es inaudita, teniendo en cuenta que declara casi 270 kg llena. Cambios de dirección instantáneos, reacciones directas a las insinuaciones del manillar, nulo esfuerzo para redirigirla y plena confianza para corregir la trazada en caso de equivocarnos o de mantener un ritmo casi de streetfighter en tramos revirados, son coser y cantar para esta «Triple Black T32». Si quieres un feeling de supermotard pero con 136 CV, ya sabes lo que tienes que hacer.