Como todas las versiones especiales, la Triumph Thunderbird Nightstorm comparte gran parte de su alma con la moto de la que nace, la Thunderbird, lo que la sitúa de entrada en el segmento de las “cruisers” de gran cilindrada capaces de permitir una conducción relajada o disfrutar de un momento de diversión gracias a su par de 156 Nm a 2.950 RPM. De ello se encarga precisamente su motor, un bicilíndrico “Big Bore” de 1.699 cc con pistones ni más ni menos que de 107,1 mm.
Otro de sus puntos destacados es el acabado, en lugar de lucir los típicos cromados, todos ellos se han sustituidos por negro, lo que le da una apariencia más agresiva que su modelo madre. De hecho en Triumph han puesto especial cuidado en el apartado de la pintura y sin ir más lejos el depósito ha sido pintado a mano.
También el escape ha sucumbido al negro, con una pintura resistente al calor, así como retrovisores, estriberas, pedales… solamente las barras y algunos detalles han aguantado el cromado.
Como es habitual en este tipo de modelos, el asiento está cerca del suelo, a 700 mm, lo que aumenta las sensaciones de quien está encima de la máquina.
Por el momento se desconoce el precio final de esta edición especial, que llegará a los concesionarios en marzo del próximo año.