Suzuki Clean Ocean es el proyecto que ha puesto en marcha Suzuki y que busca, como su propio nombre indica, limpiar los océanos. De todas las partículas que los contaminan, una de las más dañinas son los microplásticos.
Los microplásticos son pequeñas partículas menores a cinco milímetros que son producto de la degradación de los elementos plásticos. El problema es que esa degradación continúa hasta que los plásticos terminan por tener tamaños nanométricos, y son capaces de pasar por las membranas celulares afectando a los seres vivos.
Pero no sólo eso, los propios habitantes de los mares y océanos sufren también los microplásticos al ingerirlos, los asimilan en sus organismos y luego, tal como demuestran los estudios, terminan llegando a la comida humana. Aunque todavía no hay conocimiento suficiente de cómo repercuten en nuestro organismo, no cabe duda de que no es una situación que podamos tomar a la ligera.
Suzuki y su trabajo sobre la identificación de microplásticos junto a la Universidad de Shizuoka
Así que ante tal problema y dentro del anteriormente mencionado proyecto, Suzuki ha llegado a un acuerdo con la Universidad de Shizuoka a través de la cual investigarán de manera conjunta sobre la identificación de microplásticos, basada en las propiedades de adherencia y coloración de las proteínas al plástico.
De esta manera y gracias a la especialización sobre la investigación de enzimas y proteínas que poseen los microorganismos de la Universidad de Shizuoka, se podrá a llevar a cabo este experimento. Utilizando una proteína que tiene la propiedad de adherirse a los plásticos y colorearlos se podrá identificar con precisión y rapidez los plásticos y su tipología.
Es en el apartado de la recogida de los microplásticos donde Suzuki entra en juego, y es que estos serán recogidos en sus motores fueraborda con el dispositivo de recogida de microplásticos que equipan algunos motores y gracias a los cuales se podrá llevar a cabo este proyecto.
Este estudio, que cuenta además con el apoyo de clientes de Suzuki por todo el mundo, ayudará a proteger el medio marino tal como afirmaba Shuichi Mishima, Director General Ejecutivo de Operaciones Marítimas de Suzuki:
“A través de esta investigación conjunta con la Universidad de Shizuoka, queremos aprovechar la tecnología de identificación de microplásticos para apoyar el interés y los esfuerzos de los clientes por proteger el medio marino, y contribuir a su mejora”.
Otro aspecto, no sólo de Suzuki sino de toda la humanidad, será ver cómo poder recoger esos diminutos contaminantes y poder reciclaros. Sabemos que hay quien los ha conseguido convertir en carburante, así que puede terminar siendo incluso un lucrativo negocio.
