Si quieres proteger una motocicleta en medio del tráfico puedes dotarla de sistemas de radar delantero y trasero para, de esta forma, sea capaz de monitorizar el tráfico y ayudar el conductor en caso de situaciones de peligro. Pero ello no evita que el resto de conductores se percaten de que estás ahí. Ellos dependerán de sus propios sistemas (radar, visión periférica) para comprobar que efectivamente te encuentras cerca de ellos.
Sin embargo lo que también se puede hacer es, como ocurre en la marina con los barcos de menores dimensiones, montar un sistema que aumenta tu visión frente a las ondas del radar. Hoy en día en el que muchos coches ya equipan estos sistemas para realizar frenadas de emergencia, un aumento de la visibilidad hará que automáticamente sepan que estamos ahí. Puede que el conductor no, pero sí el coche y tome entonces las decisiones por él.
La ventaja de estos reflectores es que son mucho más baratos que un radar y, por lo tanto, no disparan el precio final del sistema. Suzuki ha decidido tomar esta dirección tal y como podemos ver en una serie de patentes colocando, de forma estratégica, reflectores tanto delante como detrás con lo que consigue aumentar nuestra visibilidad. Además estos reflectores en muchos casos quedan ocultos en el interior de los faros o detrás de los plásticos, con lo que visualmente son inapreciables.
A veces, las mejores ideas no son las complicadas sino las más sencillas.