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Nunca te subas a la moto sin revisar estos cinco puntos

Cómo verificar los neumáticos antes de salir y en 2 minutos
Fotos: Bridgestone
Siempre decimos que los neumáticos son la única parte de la moto que está en contacto con el suelo. Es por ello que nuestra seguridad depende de ello y, por ese motivo, repasamos cuáles son los cinco puntos clave que debes revisar.

Puede que no le prestes especial atención a los neumáticos de tu moto, pues al fin y al cabo están ahí, aguardando. Sin embargo, siempre hay que ser conscientes de que nuestra seguridad y las prestaciones y reacciones de la moto van a depender de ellos. Es por ese motivo que hay que mimarlos, revisarlos y tenerlos en cuenta. Estos son los cinco puntos que debes revisar en los neumáticos de tu moto para poder circular tranquilo. Todos y cada uno de ellos son importantes y pueden evitarnos muchos quebraderos de cabeza.

Revisa la presión

Cada neumático tiene que contar con su presión correcta, ni mucha ni poca, la que toca. Es por eso que hay que revisar con un manómetro que en el interior de nuestro neumático llevamos la presión de aire que toca. Cada moto y cada neumático deben tener una presión concreta que indica el fabricante.

Recuerda que a la hora de revisar la presión siempre has de hacerlo en frío, en el punto más cercano a casa que tengas disponible. De lo contrario el aire del interior se calienta y las mediciones no son las correctas. Es más, si tienes posibilidad lo mejor es que cuentes con un manómetro portátil pues como sabes las mediciones en gasolineras no suelen ser exactas y además podrás medirlas antes de arrancar. Como dato curioso sobre la presión y para que te hagas una idea de cómo le afecta la temperatura a la presión, esta puede variar simplemente por la temperatura ambiente y en los meses más extremos de calor pueden llegar a darse variaciones de un 8% sin que nosotros intervengamos. Imagina la diferencia si has estado rodando.  

El desgaste jugará en nuestra contra, especialmente en agua

Comprueba el desgaste

Además de peligroso (muy peligroso de hecho) es ilegal circular con los neumáticos por debajo de un cierto nivel de desgaste. Este nivel es de 1,6 milímetros y es el mínimo que las franjas del neumático deben tener de profundidad. Para que te hagas una idea estamos hablando del perfil dorado de una moneda de un euro aproximadamente. De todas maneras lo ideal es medirlo con herramientas digitales e ir guiándonos por los propios avisadores que llevan las ruedas.

Recuerda que un neumático gastado no tendrá el mismo agarre que uno nuevo y esto puede influir en todos los comportamientos de la moto ya sea acelerando, girando o frenando. Igualmente, perderemos capacidad de evacuación de agua.

Controla que el desgaste sea uniforme

Ya que estás controlando el desgaste, es importante que mires cómo se está produciendo. En función de si llevamos la presión correcta o no desgastaremos más los flancos (presión baja) o la zona central (presión muy alta). Igualmente este desgaste no suele ser uniforme si rodamos mucho por la autopista, ya que el neumático se quedará prácticamente cuadrado.

En los flancos encontramos mucha información del neumático

Observa el estado de la cubierta

Otro de los puntos importantes es el conocer cómo está la cubierta del neumático. Puede que a simple vista esté todo en orden, pero lo cierto es que con un vistazo rápido podemos localizar algún desperfecto como un pequeño corte o un objeto clavado que pueden suponer un serio problema al ponernos en marcha. Una simple inspección ocular a conciencia en ambos neumáticos será suficiente. Por cierto, la mayoría de pinchazos se producen en el neumático trasero, así que si ha perdido presión podría deberse a ello.

Revisa la edad

Actualmente no hay una limitación en lo que a tiempo de fabricación del neumático se refiere. Lo importante es que esté en buen estado, pero con el paso del tiempo y aunque no tenga desgaste puede comenzar a deteriorarse en otros aspectos y a aparecer pequeñas grietas. Esto es algo que pasa en neumáticos viejos y el proceso puede ser más rápido en caso de que esté expuesto a la intemperie de manera habitual. Incluso podemos tener un neumático perfecto de estado físico pero que haya perdido sus propiedades al endurecerse. Por eso, antes de que eso suceda es preferible sustituir el neumático.

La estimación es que los neumáticos comienzan a perder parte de su rendimiento entre los cinco y diez años desde la fecha de fabricación, es por eso que es importante que conozcas cuándo se ha fabricado. Esa y otra información valiosa la encontrarás en los flancos del neumático y en este artículo te contamos qué significan todos esos datos.

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