Es una pena que no hayamos encontrado más información sobre el particular vehículo que os traemos hoy, más allá de lo que nos cuentan los compañeros de Autoevolution. Y es que el Modulo M89, que así se llama este híbrido entre triciclo y coche que se ha puesto a la venta, es de lo más raro que hemos podido ver últimamente. Sobre todo porque parte de la base de una BMW K75.
Este Modulo M89 data de 1997 y fue construido en Italia, posiblemente por un pequeño taller o carrocero al estilo del conocido Dragon TT español, que rediseña vehículos con el fin de darle otra estética y/o características.
Lo más curioso del Modulo M89 es que está fabricado a partir de una BMW K75, de la cual conserva (más o menos) el tren posterior y toda la mecánica. Sin embargo delante tiene toda la apariencia de un coche, con dos ruedas y una cabina cerrada en la que se ubican mandos iguales a los de un automóvil.
El motor de tres cilindros en línea de la BMW mantiene sus 70 CV, pero ahora se verán algo más lastrados por el aumento de peso, unos 470 kg. La caja de cambios original también está presente, con sus cinco marchas, pero se manda a través de una palanca secuencial instalada en el lado derecho.
En cierta medida nos recuerda al Pulse Autocycle en cuanto a su configuración de cabina, donde el conductor y el pasajero van sentados en tándem uno detrás de otro. También el hecho de que vayan protegidos por una carlinga muy similar a la de un avión.
Con solamente 1.000 km, el Modulo M89 se vende en Auto Vergiate por un precio de 38.000 euros. Mola casi más que uno de esos trikes artesanales con motor Volkswagen.