Aunque el diseño que nos han comentado nuestros compañeros de Morebikes cuenta con la base de una Kawasaki Nija 300, los cambios en este modelo eléctrico son bastante notables a excepción de la carrocería y la parte de ciclo.
Así la parte media del modelo está ocupada por el sistema de baterías y demás elementos electrónicos necesarios mientras que el chasis también es de nueva factura. Este es uno de los elementos más importantes en esta patente ya que su construcción modular es desmontable por la parte izquierda gracias a sendos anclajes situados en la zona de la pipa de la dirección así como en la zona de las estriberas.
Una vez desmontada esta parte del chasis, ya se puede extraer todo el conjunto de baterías gracias a una plataforma lateral que incorpora una bandeja desplazable a la que se ancla todo el sistema. De esta forma, es posible volver a contar con una autonomía completa en mucho menos tiempo del que se tardaría en recargar en una toma de corriente.
Lógicamente hablamos de un desarrollo en forma de patente y, en muchos casos, no llegan a producción y sirven únicamente para proteger los desarrollos tecnológicos de las empresas. Aun así no deja de ser curioso ver un chasis que desmonta una de sus zonas principales. Sería interesante ver cómo se comporta respecto a uno soldado.