Parece que las marcas japonesas, poco a poco, se van animando a la hora de desarrollar motos eléctricas. O mejor dicho, motos de altas prestaciones más allá de scooter pensados para la movilidad urbana. Quizás quien lo lleva más adelantado es Kawasaki con su EV Endeavor, pero también Honda con una CBR eléctrica. Ahora Suzuki también se une a la fiesta con la patente de su propio prototipo eléctrico.
Las patentes filtradas muestran lo que parece una motocicleta de aspecto deportivo, o al menos eso nos parece a la vista del chasis de doble viga de aluminio o el notable basculante que utiliza. Mientras que el conjunto de elementos eléctricos están ubicados en la parte inferior, donde encontramos el motor eléctrico de buen tamaño y aparente potencia (9), convertidor (14) e inversor (13) eléctricos de control. Por encima se ubica el compartimento para la batería (7-8).
La patente que vemos está centrada en el sofisticado sistema de transmisión y embrague (16) que permite hacer funcionar la moto y, al mismo tiempo, el sistema de refrigeración. Porque esta Suzuki cuenta con un motor eléctrico refrigerado por agua (el radiador es el 81 y la bomba de agua el 82) además de una transmisión por cadena (10).
El compacto embrague (situado a la izquierda de la moto) va conectado por detrás de varios engranajes que llevan la potencia del motor a la transmisión final (cadena y rueda trasera). Cuando circulamos normalmente, la bomba de agua no resta potencia al motor. Si la temperatura sube y lo exige, el embrague se activa y se transmite energía del motor a la bomba. La idea es evitar robar potencia al motor siempre (como ocurre en las motos de combustión) y ahorrarse usar una bomba con motor eléctrico aparte.
Estaremos atentos por si aparece nueva información sobre la futura moto eléctrica de Suzuki pero está claro que, al patentar sistemas en detalles como éste, llevan su tiempo trabajando en estas motos.