Hemos recibido una nueva consulta en nuestro Consultorio de MotoGuía, en la que nuestro amigo Joao nos cuenta que está buscando una moto nueva. Está pensando en una de corte streetfighter o supermoto y la quiere usar para todo tipo de uso y, también para viajes. Esto nos ha llevado a preguntarnos si una moto de este tipo es una buena opción para viajar. Vamos a repasar las características básicas que tienen este tipo de motos para ver cuál es su habitat y dónde se desenvuelven mejor.
Hay que decir que las motos de corte streetfighter tienen dos características muy concretas: son naked y deportivas. Es decir, de entrada estamos hablando de motos que no tienen protección aerodinámica ninguna pero que, además, sus geometrías, prestaciones, reacciones y posición de conducción van a ser mucho más radicales que en una moto naked al uso. Podemos decir sin lugar a equivocarnos que una moto streetfighter es una deportiva más cómoda, quizás algo más dócil porque suelen ofrecernos algo menos de potencia, así que podemos afirmar que puede ser más dosificable y cómoda para carreteras de curvas.
A partir de ahí hay que plantearse si es una moto que nos permita viajar de manera cómoda y es que, como vimos con el viaje de una 125 por autopista, viajar es posible. Aun así, lo primero que tenemos que tener claro no es si vamos a viajar, sino cuánto lo vamos a hacer. Si nos enfrentamos a viajes esporádicos no va a suponer ningún problema, y siempre podremos ganar algo de protección aerodinámica poniendo algún deflector o pequeña pantalla que encontremos en la industria auxiliar.

Por contra, si vamos a hacer principalmente viajes, es más que probable (especialmente si usas autopista) que pronto empieces a no sentirte cómodo con una moto de este corte. Las ventajas que tiene esta moto salen a relucir en las carreteras reviradas, incluso en la ciudad gracias a la capacidad de maniobrabilidad que tienen comparada con una RR gracias al manillar ancho, pero no en los viajes. Podemos decir que, quitando los viajes, las motos naked o sus versiones más radicales como las Streetfighter son motos bastante versátiles hasta cierto punto, y no hay más que ver lo rápido que se puede ir con ellas en circuito.
Aun así, como decíamos antes, si vas a embarcarte en viajes y especialmente si estos incluyen largos tramos de autopista no va a ser tu mejor aliada. Eso sí, siempre podrás minimizar las sacudidas en tu cabeza con algún casco de aerodinámica trabajada y pensada para motos naked, tus cervicales lo agradecerán con el paso de los kilómetros.
En cuanto a las supermoto, no le daremos muchas vueltas, son motos divertidas y eficaces en carreteras de curvas, pero no son una buena opción para viajes incluso si hablamos de viajes puntuales.