Cuando llegamos a nuestra casa y vemos que entre el correo del día se ha colado una multa, es una sensación difícil de digerir. Muchos deciden pagarla de inmediato, y así poder beneficiarse del descuento del 50% por pagar la sanción de manera temprana. Sin embargo, existen mecanismos para reclamarlas en caso de que no estemos conformes con las mismas.
No tenemos que rehuir de nuestra responsabilidad como conductores, pero tampoco podemos quedarnos de brazos cruzados si la sanción que nos han impuesto es errónea. Habrá ocasiones en las que tendremos que reconocer nuestra infracción, pero igualmente debemos quejarnos cuando tengamos razón y motivos para ello.
Plazo de reclamación y errores
Una vez recibimos la multa en nuestro domicilio, disponemos de 20 días naturales, según la Ley de Tráfico vigente, para realizar las reclamaciones que estimemos oportunas. Muchas veces ocurre que los conductores, por no complicarse la vida, deciden pagar las multas y así quitarse el problema de encima. Por ejemplo, con una sanción leve, que nunca pasan de los 100 euros, con el pago anticipado se nos queda en 50, que es una cantidad más o menos asumible.
Por otra parte, no todas las multas tienen que estar en lo cierto, y si no estamos conformes debemos emplear este derecho para recurrirla. Sea cual sea tu decisión, lo que nunca se debe hacer es decir que no has recibido la multa, ya que al segundo intento de localización por parte de Tráfico, la sanción aparecerá en el Tablón Edictal de Sanciones de Tráfico, instante en el que la DGT dará por cumplido el trámite.
Posibles errores de forma
Son muchos los casos en los que la multa arroja algún fallo de este tipo. Desde errores en nuestros datos personales, hasta en la identificación de nuestro vehículo. Por ejemplo, cuando nosotros vendemos nuestra moto a un concesionario o a un particular, existen sanciones cometidas por los nuevos dueños que nos llegan a nosotros, por lo que siempre hay que estar atento.
En caso de que efectivamente hubiese algún tipo de error de forma, debemos reseñarlo en el apartado de alegaciones que podemos encontrar en Internet
Tipos de multas
Las sanciones pueden ir desde las más corrientes hasta las más insospechadas. En SoyMotero.net te presentamos las más típicas con las que puedes encontrarte, así como sus posibles errores:
Velocidad
Los excesos de velocidad componen un importante porcentaje del total de multas en nuestro país. Según cuánto hayamos excedido el límite, la sanción es mayor o menor, así como la pérdida de puntos en nuestro carnet.
En caso de que no estemos de acuerdo con la infracción, debemos pedir y asegurarnos de que la imagen ha sido tomada por un medio que reúna todas las condiciones de homologación necesarias. Todos sabemos que según qué tipo de radar, su margen de error es más o menos significativo, y eso es algo que siempre debemos de tener en cuenta a la hora de averiguar si la sanción que nos ha llegado es correcta.
Aparcamiento
Podemos encontrar casos en los que nuestra moto esté estacionada en una zona donde esté prohibido aparcar, o bien también porque nos encontremos en una zona de estacionamiento limitado. Son multas menos corrientes pero que también están a la orden del día.
En cuanto a su reclamación, son muchas las vías que se pueden escoger. Por ejemplo, si en una zona de estacionamiento regulado por horas, nos encontramos una multa por incumplimiento de la limitación horaria y no es así, podemos exigir que se aporte una prueba sobre nuestra infracción, o bien nosotros acudir con nuestro ticket, y que este demuestre que cumplimos con esta limitación temporal.
En el caso de las zonas de estacionamiento prohibido, se puede presentar una fotografía de nuestro vehículo en la que sea vea con claridad que no nos encontrábamos en una zona de este tipo.
Semáforos
Al margen de que existen zonas en diferentes puntos de España en las que los semáforos tienen un funcionamiento cuanto menos discutible, siempre que podamos debemos pedir una imagen en la que se pueda observar nuestra infracción. Muchas de estas sanciones llegan con foto para tener que evitar este trámite, pero aún así conviene prestar atención al contenido de nuestra multa.
Debemos cerciorarnos de que en la instantánea se puede leer la matricula de nuestra moto con exactitud, así como que el semáforo no se encuentre en posición ámbar en el momento de nuestro paso, en cuyo caso la infracción no sería válida. Por último, también se puede pedir un informe que certifique que el semáforo en cuestión funciona correctamente.
