En muchas ocasiones, las motos antiguas acaban en los desguaces no porque hayan recibido un mal trato o porque no sigan realizando la función para que fueron creadas. Simplemente sus propietarios no pueden mantenerlas porque no existen recambios para ellas. Y para evitar verlas sufrir agónicamente en un garaje sin poder salir a la carretera, que es su verdadero cometido, sus propietarios deciden venderla o desguazarlas.
Sin embargo, si algunos fabricantes consideran que sigue existiendo suficiente demanda para un determinado modelo, pueden plantearse seriamente volver a reeditar ciertas piezas susceptibles de ser utilizadas como recambio en motos clásicas.
Esto es lo que hizo Honda en 2017 con dos modelos que todavía gozan de gran popularidad, pero que si lo pensamos son como el día y la noche. Hablamos de la Honda CB750 Four y la Honda NSR250R; una naked frente a una rabiosa deportiva de dos tiempos. Ahora a estos dos se une un tercer nuevo modelo, la Honda CB750F, la cual también gozará de la posibilidad de contar con ciertas partes de nueva factura.
Tomando como ejemplo la Honda CB750F, todavía es posible conseguir recambio nuevo para el 41 por ciento de las piezas de este modelo. Del 59 % restante, se ha analizado cuáles no se pueden conseguir como recambio de competencia y que además son interesantes por ser susceptibles de desgaste o rotura y, de ellas, se volverán a fabricar un total de 23 nuevas piezas.
En este enlace, tenéis los recambios existentes tanto para la NSR250R como para las dos CB750 así como su precio en yenes. Y sí, hay pistones para los cilindros con agujeros… Sin lugar a dudas una magnífica noticia para los propietarios de estos modelos muy populares todavía en Japón.
