No hace falta decir que el motocross es una de las disciplinas motociclistas con más historia. Aunque a lo largo de los años ha ido evolucionando, las motos y el campo han estado siempre unidas, y la disciplina ha ido teniendo altibajos.
Esos altibajos que ha vivido el motocross han venido dados por modas, normativas e interés tanto de los aficionados como de las propias marcas. Aun así, ha habido marcas como Yamaha, Honda, Kawasaki, Suzuki, Beta, el grupo KTM… que han seguido ofreciendo sus modelos a un público de nicho, muy reducido en Europa, Estados Unidos y Japón y todavía más en otras partes del mundo, donde la moto sigue siendo herramienta y no tanto de uso recreativo.
Por eso es una gran noticia que las marcas de referencia sigan apostando por sus modelos, los evolucionen y nos pongan en bandeja motos con comportamientos y características que prácticamente, ni los pilotos de fábrica podían imaginar hace sólo un par de lustros.
Pero si tan importante es ese punto, no lo es menos que hayan entrado dos grandes marcas como Triumph y Ducati, y que Honda esté probando seriamente su moto de cross eléctrica con resultados prometedores.
Triumph y Ducati vuelven con todo al motocross
Las dos marcas europeas con unas características muy marcadas y enfocadas en las últimas décadas a la carretera, han entrado de lleno en el segmento y con pretensiones muy serias. No llegan solamente al mercado a presentar su producto, sino que llevan tiempo trabajando, lo han evolucionado, cuentan con grandes estrellas en sus filas y están dispuestos a demostrar que saben de qué hablan.
En el caso de Triumph en sus filas tenemos nombres como, ni más ni menos, Ricky Carmichael, Clément Desalle, Iván Tedesco o Iván Cervantes. Mientras en Ducati está el inimitable Tony Cairoli, o el exitoso Director Deportivo de Ducati Corse Paolo Ciabatti.
Pero hay más, es que los planes que tienen no pasan por competir en campeonatos regionales. Ya este 2024 Triumph está preparada para competir en el Mundial de MX, y lo está haciendo en nacionales como el español y hasta en el AMA SX. Por su parte, Ducati, que según la información revelada está en un paso previo de desarrollo, va a mostrar sus armas en el Campeonato Italiano de Motocross.
Y por último, pero no menos importante, tenemos los pasos que está dando Honda con la CR-E. Si las motos eléctricas tienen una gran ventaja es, sin duda, en lugares en los que se necesite par motor, tracción y aceleración y el motocross es un punto en el que se necesita y mucho.
Además, el hecho que una marca como la del ala dorada apueste antes que ninguna de las grandes marcas por una moto eléctrica de motocross, capaz de medirse cara a cara con las todopoderosas 450 de cuatro tiempos, quizás nos muestre el camino.
Eso sí, después de su debut en el All Japan, Honda participará en el Mundial FIM E-Xplorer. Un certamen reservado solamente a motos eléctricas. Será interesante ver el rendimiento de la CR-E frente a otras eléctricas, porque el resultado puede poner contra las cuerdas el reinado de las motos con motor de combustión.
Sea como fuere, lo que es claro es que el campo está más vivo que nunca para las marcas. Y a pesar de que el pastel no parece extremadamente grande y podríamos considerar que estamos ante un nicho de mercado pequeño, da la sensación que el interés por una porción es muy importante para las marcas. Y esto último, sin duda, hará que el motocross siga creciendo.