El 2024 ha sido un año marcado por cifras negativas para KTM y PIERER Mobility AG. Los ingresos han caído un 29%, alcanzando los 1.900 millones de euros frente a los 2.700 millones del año anterior. Las ventas a concesionarios también se han desplomado un 21%, con 292.497 unidades distribuidas. La producción también se redujo deliberadamente un 26% para gestionar los excesos de inventario, bajando a 230.000 motocicletas fabricadas.
El impacto más grave de esta crisis se ha sentido en la fuerza laboral, con más de 1.800 empleados despedidos en todo el grupo. Además, el EBITDA proyectado para el 2024 se encuentra en números rojos, con una pérdida operativa de 300 millones de euros, a lo que se suman gastos extraordinarios y una deuda neta que sigue en ascenso.
Pierer cede el mando
En este contexto, Stefan Pierer anunció que cederá su cargo de CEO a Gottfried Neumeister, quien ya había sido nombrado Co-CEO en septiembre de 2024. Pierer seguirá vinculado a la empresa en un rol de apoyo, pero su renuncia marca un cambio significativo en la estructura de liderazgo. Este movimiento busca calmar a los acreedores y reforzar la confianza en el plan de reestructuración.
Neumeister asume el mando en un momento crítico, con la responsabilidad de dirigir un proceso que incluye la posible entrada de nuevos inversores. Entre los interesados se encuentran el fabricante indio Bajaj, la marca china CFMoto y un fondo financiero de Hong Kong. Además, Stephan Zöchling, CEO de Remus, podría desempeñar un papel clave, tras su reciente inversión de 65 millones de euros que evitó la quiebra inmediata de KTM.
Contrastes en las ventas
A pesar de las dificultades financieras, las ventas a clientes finales se han mantenido estables, con 268.000 motocicletas entregadas. Esto refleja la confianza de los consumidores en las marcas del grupo, que incluye KTM, Husqvarna, GasGas y MV Agusta. Sin embargo, este rendimiento positivo se logró a costa de ofrecer grandes descuentos, una estrategia que, aunque efectiva para reducir inventarios, ha mermado los beneficios.
¿Un futuro incierto o una oportunidad?
El futuro de KTM y PIERER Mobility AG depende ahora del éxito de su reestructuración y de la capacidad de Neumeister para estabilizar las finanzas de la empresa. La entrada de nuevos inversores y la continuación de sus éxitos en el deporte de motor podrían ser clave para recuperar la confianza en el mercado.
La próxima asamblea extraordinaria del 27 de enero promete ser decisiva. Con un posible cambio de participaciones y nuevas estrategias sobre la mesa, KTM está en un punto de inflexión que podría definir su futuro en la industria de las motocicletas.