Yamaha sabe perfectamente lo que es correr sin un patrocinador principal pues ya tuvo que lidiar con ello hace años, concretamente entre las temporadas 2011 y 2013. Sin embargo, desde hace años cuenta con Movistar como primer patrocinador, aunque el contrato expira este año y todavía no hay indicios de que vayan a renovar.
Y es que Movistar tiene antes otro asunto más importante entre manos: la renovación con Dorna para seguir ofreciendo, en exclusiva, el Campeonato del Mundo de MotoGP. Y de que el operador telefónico español continúe o no con ello dependerá, lógicamente, si extiende el patrocinio junto al equipo Yamaha.
No obstante Yamaha parece ya estar barruntando un plan B. Y es que con el fin de la alianza entre Yamaha y Tech3, el equipo francés tendrá para la temporada que viene sendas KTM cuya relación es tan cercana con Red Bull que no querrían ver a Monster sobre una de sus motos.
Así la bebida energética, con quien Yamaha tiene muy buenas relaciones gracias también a que es el patrocinador personal de Valentino Rossi, podría exponsorizar a la escudería oficial de Yamaha, pasando a ser el patrocinador principal de las motos tanto de Rossi como de Maverick Viñales.
¿Veremos un Monster Yamaha MotoGP?