Los aficionados a la F1 están viviendo la temporada más apasionante de los últimos años, con el duelo que están protagonizando fin de semana tras fin de semana Lewis Hamilton y Max Verstappen. El siete veces campeón del mundo está viendo como el joven holandés intenta arrebatarle el título, y las polémicas entre ambos cada fin de semana están servidas. Aun así, la Federación Internacional de Automovilismo, FIA, a través de su campaña FIA Action for Road Safety, ha elegido a ambos junto con el resto de pilotos de la parrilla en su nueva iniciativa. Sorprendentemente esta iniciativa no está dirigida al mundo de los coches, sino a los usuarios de motocicletas de los países en vías de desarrollo, y busca fomentar el uso del casco a la vez que ha diseñado un casco económico que sea asequible.
Uno de los grandes problemas que encontramos a día de hoy en muchos países es que, o bien el casco no es obligatorio, o bien mucha gente decide no usarlo ya sea por precio o por comodidad. Así, para luchar contra ello y calculando que esta iniciativa podría llegar a salvar 3.500 vidas (precisamente el hashtag de esta campaña #3500LIVES), han desarrollado dos cascos que son económicos pero que cuentan con la certificación ECE 22.05. Con ello y tras realizar un estudio, han estimado que se podría reducir el riesgo de lesiones en caso de accidente en un 44%.
Lo cierto es que viendo los cascos podemos llegar a la conclusión de que no son los más seguros del mundo. De hecho son los que aquí denominaríamos “demi-jet” y, además, una de sus versiones cuenta con grandes rejillas para la ventilación que si bien aumentan la comodidad hace que ofrezcan menos protección. Eso sí, hay que tener en cuenta que esta iniciativa y estos cascos en concreto están diseñados para países en los que el clima es cálido y húmedo, por lo que el confort debe ser un factor muy a tener en cuenta si se quiere conseguir una buena aceptación.
El proyecto fue presentado durante el pasado GP de México y algunas de las principales figuras del campeonato se sumaron a él presentando uno de estos cascos con su propio diseño. Como decíamo,s Hamilton y Verstappen se han sumado a la iniciativa, pero también pudimos ver a Sebastian Vettel o Daniel Ricciardo entre otros con su casco. De hecho, la FIA anunció que destinará 2.500 cascos en el país americano para destinarlo a las zonas que necesitan ayuda en este sentido. Se estima que en 2020, de los accidentes de tráfico mortales en México, un 20% se produjo en motocicletas, por lo que la ayuda de la FIA siempre será bienvenida.
Aun así, no deja de ser curioso que sea la Federación Internacional de Automovilismo quien se ponga al frente de la protección del usuario de motos en el mundo, en lugar de la Federación Internacional de Motociclismo. Esperemos que este “tirón de orejas” pueda servir de impulso para que Jorge Viegas y toda la organización den un paso también en este sentido.